David Ramos •  Cultura •  07/10/2019

Zombie Walk en Sitges. Cortometrajes y «Guns Akimbo», psicodelia cyberpunk

En esta 52ª edición, decidimos acercarnos a la Platja de San Sebastià para participar en la Zombie Walk. 350 zombies se pasearían por la ciudad en una terrorífica procesión a las 19h de la tarde en Sitges. Desde las 7 de la mañana los más madrugadores acudían con sillas, neveras y demás elementos de superviviencia para la larga espera que les aguardaba. A las 12 de la mañana se comenzaron a repartir los números para los 350 afortunados que serían maquillados por los más de 20 profesionales que estaban en la carpa de maquillaje.

Zombie Walk en Sitges. Cortometrajes y «Guns Akimbo», psicodelia cyberpunk

Tras recibir nuestros números, aún habríamos de esperar 2 horas más para pasar a la carpa. Soportando un sol de justicia, haciendo turnos para ir al baño o sentarse, cuando llegó nuestro turno apenas necesitábamos unos retoques para que nuestras caras parecieran las de muertos vivientes.

En resumen, una experiencia agotadora y desesperante de 4 horas y media de espera, que a buen seguro no volveré a repetir jamás.

Ataviados con nuestro terrorífico aspecto, que causaba las delicias del numeroso público presente en el festival durante el fin de semana, acudimos al Auditori a disfrutar de “Guns Akimbo” (Jason Lei Howden). La película está enmarcada dentro de la sección Órbita del festival, que incluye títulos inéditos en España, producidos entre 2018-2019 y de temática fantástica, que apuestan por la experimentación, los nuevos lenguajes y formatos y la hibridación de géneros.

Miles (Daniel Radclife) vive como un pardillo hasta que se topa sin querer con SKIZM, una banda clandestina que organiza duelos de muerte reales para emitirlos por internet. Miles es un experto en huir de absolutamente todo, pero no le será de gran ayuda para sobrevivir a Nix (Samara weaving), una psicópata asesina con una gran sección de fans entre los seguidores del macabro programa.

La película es una fantasía cyberpunk con un ritmo frenético y un sonido y banda sonora que encajan a la perfección con la acción de las trepidantes escenas que se suceden en la pantalla.

Destinada sin duda a alcanzar a una audiencia joven con continuas referencias a las redes sociales, videojuegos y violencia, supone un producto altamente entretenido y fresco.

Cabe señalar que el Auditori estaba lleno hasta la bandera con personas que prefirieron sentarse en el suelo a ver la película demasiado esquinados en los laterales de la sala. Si alguna vez piensan en acudir al festival, cosa que deben hacer al menos una vez si son amantes del cine, eviten el fin de semana. De nada.

Al salir de la proyección tan sólo tuvimos que rodear el edificio para alcanzar la fila de entrada a la Sala Tramuntana donde se iban a proyectar la II Sesión de cortos Fantásticos a competición.

Esta segunda entrega de cortos constaba de 10 cortos con una duración total de 146 minutos. Todos ellos de producción española o latinoamericana. Sin embargo,tuvimos que echar mano de los subtítulos en numerosas ocasiones, ya que la mala calidad de sonido de algunos de ellos hacía ininteligibles partes de las películas. De esta segunda tanda de cortos, que adoleció de la altísima calidad demostrada en anteriores ocasiones, destacaría dos.

La bruja del fósforo paseante” (Sofía Carrillo) es una producción mexicana que trata sobre Agustina, una mujer que intentará detener la boda de su único hijo varón con una mujer del pueblo atacando a su prometida, sin saber que ésta tiene una misteriosa defensora.

La cinta transcurre en una pequeña aldea del México rural, perfectamente retratado por su directora Sofía Carrillo. Las tradiciones populares acertadamente reflejadas, la música y el vestuario muy bien cuidados y una dosis justa de efectos especiales hacen del corto una experiencia casi onírica y de cuento de brujas maravillosa.

El segundo mejor corto de la noche corría a cargo de Álvaro Vicario y su “Polter”. La cinta era la única comedia que se presentaba en la sesión. En ella, Pedro (José Lozano) se enfrenta a un suceso paranormal que irrumpe en su hogar. Lo que comienza como un simple incidente doméstico acabará siendo una lucha sin cuartel contra una fuerza sobrenatural. Divertidísima comedia, que arrancó numerosas carcajadas entre los allí presentes y con unos efectos especiales dignos de una producción mayor.

 


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