Eduardo Montagut Contreras •  Memoria Histórica •  12/10/2016

El teniente Granell

Amado Granell Mesado, el teniente Granell, fue un héroe de la II Guerra Mundial. Su vida cambió con la guerra civil, como la de todos los españoles, en un sentido u otro. Al terminar la contienda tuvo que marchar al exilio para salvar la vida. Fue a Argel donde se alistó en los Corps Francs d’Afrique, con los que combatió y calló herido gravemente en la cabeza. En la Segunda División Blindada fue puesto al mando de la Novena Compañía en un semioruga que fue bautizado como Los Cosacos. Granell luchó contra los alemanes del África Korps en Túnez. Allí consiguió ser teniente.

Granell tuvo el honor de ser el primer militar aliado que entró en París por la Puerta de Italia. Fue condecorado con la Legión de Honor por el general Leclerc. En el acto pronunció una frase inmortal:

«Si es verdad que Napoleón creó la Legión de Honor para premiar a los bravos, nadie se la merece como usted»

De Gaulle quiso hacerle comandante del ejército francés pero, para ello, tenía que nacionalizarse francés pero era una condición que Granell no estaba dispuesto a hacer. Al parecer, formuló otra frase famosa sobre España como madre y Francia como novia.

Granell murió en Sueca en el año 1972 a consecuencia de un accidente de tráfico.

Para los interesados en el papel de los españoles en la liberación de Francia ya hemos comentado que existe una reciente publicación de Evelyn Mesquida, La Nueve. Los españoles que liberaron París, en Ediciones B.


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