El «Navios Felix», buque habitual en la ruta del carbón hacia Israel, atraca en Ceuta vulnerando claramente las provisiones del Real Decreto Ley aprobado por el Gobierno
El buque se encuentra ahora mismo atracado en Ceuta, viene de Sudáfrica, uno de los principales suministradores de carbón a Israel y se dirige hacia el puerto de Hadera, Israel con 170,000 toneladas de carbón.
El carbón que transporta forma parte de la red internacional de suministro energético del genocidio, sin el que sería imposible sostener las gravísimas vulneraciones de derechos contra el pueblo palestino.
Además, contraviene claramente el Real Decreto-ley 10/2025, de 23 de septiembre, que prohíbe el tránsito por puertos españoles de combustibles o materiales con posible uso militar destinados a Israel.

Comunicado
El RDL, decreto aprobado por el Gobierno español el pasado septiembre y validado por el Congreso hace tan sólo unas semanas, establece que “se denegarán las solicitudes de autorización de tránsito con destino a Israel de combustibles que puedan tener un uso final militar”.
Según el informe Powering Injustice de SOMO (Center for Research on Multinational Corporations), el carbón desempeña un papel clave en el sistema energético israelí y en su aparato militar. En 2023, el 17,5% de la electricidad de Israel se generó en plantas de carbón, y toda la energía producida por la red nacional se distribuye a los asentamientos ilegales en Cisjordania y al ejército israelí.
El estudio detalla que:
- La Israel Electric Corporation (IEC), empresa pública que gestiona toda la red eléctrica, abastece sin distinción a las bases militares, la industria armamentística y los asentamientos ilegales.
- Las autoridades israelíes utilizan la electricidad como herramienta de control y castigo colectivo, cortando el suministro a comunidades palestinas mientras garantizan el abastecimiento constante de colonias y puestos militares.
- La electricidad producida con carbón importado alimenta sistemas de vigilancia y control basados en inteligencia artificial, incluidos drones y tecnologías desplegadas contra la población de Gaza.
Por tanto, no existe un uso “civil” del carbón exportado a Israel: toda la energía generada forma parte del mismo entramado de ocupación ilegal y represión.
Desde la RESCOP y la Campaña por el Fin al Comercio de Armas exigimos al Gobierno que aplique de inmediato el artículo 2 del Real Decreto-ley 10/2025, retengan la carga y adopten medidas para impedir que los puertos españoles continúen siendo parte de la logística del genocidio.
Permitir que el Navíos Félix atraque en Ceuta y siga su camino hacia Israel pone a prueba la aplicación efectiva de ese compromiso. Permitirlo sería un grave incumplimiento del marco jurídico y político que España ha adoptado para prevenir su complicidad en el genocidio en Palestina.