Redacción •  Actualidad •  08/06/2025

CCOO denuncia el despido de una trabajadora de la Residencia Fragela en Cádiz como sabotaje a las elecciones sindicales

  • Antonio Aroca Guerrero, secretario general de CCOO en el sector de la dependencia en Cádiz, asegura que desde el día 9 de abril conoce de primera mano que se va a tramitar la creación de un comité de empresa; de ello fue informado por las trabajadoras que liderarán este proceso, entre las que estaba la gerocultora despedida Tania García Román.
  • El día 10 estas trabajadoras informan a toda la plantilla a través del grupo de whatsapp de la residencia del inicio de los trámites, incluyendo al personal de confianza del director del centro.
CCOO denuncia el despido de una trabajadora de la Residencia Fragela en Cádiz como sabotaje a las elecciones sindicales

La central sindical CCOO ha denunciado que el despido de una trabajadora de la Residencia Fragela ha estado motivado por la voluntad de boicotear la formación de una representación de los trabajadores en el centro. Un sabotaje del que responsabilizan directamente al teniente de Alcalde de Cádiz y director de la residencia, Pablo Otero.

Según ha trasladado la central sindical, el pasado día 28 de abril, el concejal en el Ayuntamiento de Cádiz y gerente de la Residencia Fragela, Pablo Otero, convocó a todo el personal de la residencia con el claro objetivo de impedir la formación del Comité de Empresa a base de transmitir incertidumbre del futuro de la residencia, tras haber conocido a principios de abril la formación del Comité.

Además, según denuncia que la actitud de intimidación continuó, tras recibir a través de CCOO la notificación del preaviso de elecciones, con fecha 6 de mayo. Según el sindicato, ese mismo día, el director de la residencia reunió al departamento de cocina para informarles de las consecuencias que tendría la formación de un comité de empresa; al día siguiente, 7 de mayo, hace lo propio con la plantilla de limpieza y lavandería.

«El día 14 de abril, las trabajadoras integrantes de la candidatura se reúnen con Pablo Otero para pedirle el cese de su actitud; su respuesta es el despido de Tania, decisión que hace efectiva al día siguiente, 15 de mayo, de forma presencial y personal. No fue así en el proceso de readmisión, en el que no estaba presente en el centro para pedir disculpas a la trabajadora y delegó la entrega del documento que firmó a la coordinadora de la residencia», continúa relatando el sindicato.

En el despido de Tania, motiva Pablo Otero, en nombre de la Fundación Fragela, una reestructuración interna de la empresa, reconociendo en el mismo documento de despido que es improcedente. Ese mismo día se procede a la contratación de otra gerocultora para cubrir el puesto de Tania.

«Pablo Otero asegura que en Fragela siempre ha habido paz social y asegura que va a seguir trabajando para que así siga; sin embargo, en el día hizo entrega a toda la plantilla de un documento para su firma en el que recoge avisos al comité de empresa», afirman. «Comisiones Obreras en nota de prensa anterior agradeció a la Fundación Fragela su intervención en la decisión del gerente, sin la cual estamos convencidos, Pablo Otero no habría “decidido” la readmisión de la gerocultora», añaden.

El sindicato ha reconocido que no denunció los hechos con anterioridad, bajo el convencimiento de que la Fundación Fragela y el Ayuntamiento obligarían a Pablo Otero a respetar el proceso electoral. «Sin embargo, sus declaraciones a los medios de prensa, con una clarísima intención de lavar su imagen, en las que vincula su imagen a la de la Fundación Fragela y al equipo de Gobierno del ayuntamiento y que se basa en un cúmulo de mentiras, nos obliga a poner en manos de todos los afectados la documentación e información a la que hacemos referencia para que sean conscientes de que lo que Pablo Otero expone como su versión, “su verdad”, es una total y absoluta mentira», han afirmado.

«La verdad es que era conocedor de que se estaba montando un comité, que conocía los nombres de las líderes de este proceso y que, entre todas las presiones que ejerció personalmente para impedir que los trabajadores se organizaran para la defensa de sus derechos, estaba el despido de Tania García Román», han señalado, añadiendo que «no había ningún motivo distinto para su despido, ni económico ni estructural, ya que la plaza de Tania fue cubierta inmediatamente por ser imprescindible».


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