Rechazan política de control de plagas en San Sebastián de los Reyes

Recientemente el Ayuntamiento de San Sebastián de los Reyes ha hecho público que en 2024 fueron capturados y sacrificados 12 ejemplares de jabalíes en la localidad a través de la empresa Adda Ops S.A., a la que adjudicó el contrato por un coste próximo a los 15.000€.

Esta empresa, dedicada al “control de plagas” y “exterminio de animales” ha vuelto a ser la adjudicataria del contrato en 2025 por un valor que supera los 76.000€, y que además de jabalíes incluye conejos, palomas, cotorras argentinas y otras especies silvestres y exóticas sin especificar, tal y como figura en el pliego de prescripciones técnicas, donde incluso se establece el uso de carabinas para abatir ejemplares en espacios y parques públicos.

Desde la organización ecologista afirman que “la alcaldesa Lucía Fernández y el concejal Diego Domingo García mintieron cuando afirmaban públicamente en 2024 que los jabalíes capturados serían reintroducidos en su hábitat natural”, también añaden que las propias plataformas animalistas mostraron sus dudas sobre el cumplimiento de este compromiso que ahora consideran que continuará sin cumplirse, lo que supondrá la muerte encubierta e injustificada de más animales.

Ecologistas en Acción ha manifestado su repulsa y condena ante la decisión del ayuntamiento de contratar los servicios de Adda Ops, cuyos métodos consideran cruentos y letales para la gestión de la fauna, y añaden que “han demostrado ser ineficaces y suponen un riesgo añadido para la ciudadanía, rigiéndose por criterios de rentabilidad económica opuestos a la ética y basados en el desprecio por la vida animal y sus derechos, lo que resulta inaceptable en pleno siglo XXI”.

La organización ecologista reclama la inmediata paralización de estos métodos letales y la apertura de un proceso de diálogo con personas expertas en etología, biología y colectivos animalistas de cara a implementar un protocolo de gestión ética de la fauna. Asimismo, solicitan la transparencia total sobre el contrato adjudicado y los métodos específicos que está empleando la empresa en cuestión y ponen en valor la biodiversidad del municipio como un bien a proteger.