Redacción •  Actualidad •  21/12/2023

Tras el encierro, nueva manifestación en Carabanchel en defensa de la Sanidad Pública

Tras protagonizar durante 3 días un encierro reivindicativo en dependencias de Gerencia de Atención Primaria, vecinas y vecinos del madrileño distrito de Carabanchel llamamos a seguir movilizándonos en defensa de los centros de salud y de la sanidad pública. Por ello convocamos este jueves 21 de diciembre una nueva manifestación que saldrá del emblemático Centro de Salud de Abrantes uno de los más abandonados por la comunidad de Madrid.

Tras el encierro, nueva manifestación en Carabanchel en defensa de la Sanidad Pública

El pasado miércoles 13 de diciembre una representación de vecinas y vecinos se de Abrantes se reunió con con varios/as responsables de Gerencia de Atención Primaria, la administración responsable de los centros de salud madrileños. Queríamos soluciones para la situación de abandono de nuestro ambulatorio, un caso especialmente sangrante -tiene ahora menos del 60% de médicas/os de familia que hace tres años-, de los efectos de los recortes en la Atención Primaria y en la sanidad pública. Situación de abandono que, hay que resaltar, el barrio lleva denunciando desde hace más de 3 años, con manifestaciones semanales. En esa reunión la administración madrileña reconoció la situación crítica del centro pero en lo relativo a la incorporación de personal médico al mismo (la principal carencia), no compartieron ningún plan concreto.

Sabíamos que la Gerencia de AP ya había recibido en una ocasión anterior a profesionales de la sanidad del distrito de Carabanchel, había abordado con ellas y ellos la situación de abandono del Centro de Salud de Abrantes y también había hecho promesas que luego no se cumplieron. Y nuestra experiencia era que, no solo las buenas palabras de esa anterior reunión no habían desembocado en mejora alguna sino que, bien al contrario, desde entonces se ha producido un empeoramiento constante de la situación del centro. Por eso decidimos no levantarnos de la mesa sin haber recibido de la administración un plan concreto de mejora real para este centro.

En el hall de entrada del edificio de Gerencia permanecieron una veintena de vecinas durante 8 horas. En la planta 6º, desde la mañana del 13 hasta la mañana del 15, hemos permanecido en las sillas del despacho en el que tuvimos la reunión, cuatro vecinas y vecinos (aunque uno de nosotros se tuvo que ir a trabajar el jueves al mediodía). Hemos aguantado lo que hemos podido pero nuestras obligaciones -laborales y personales- nos constriñeron a dejar el encierro. Pero esto no es el final de la lucha y reclamación en defensa del centro de salud de Abrantes. Esta protesta ha logrado romper los muros del silencio y ninguneo mediático y ha impulsado a que se vuelva a hablar sobre la situación de abandono de los centros de salud en los barrios de clase trabajadora del sur madrileño.

Mientras manteníamos el encierro, el jueves 14 una manifestación de vecinas y vecinos recorría las calles de Carabanchel exigiendo mejoras en la Atención Primaria. En esa manifestación se decidió colectivamente volver a manifestarnos el próximo jueves 21 ante el centro de salud de Abrantes.

No dudamos de las buenas palabras de la Gerente Adjunta -”no queremos está situación”; “estamos haciendo todo lo posible”; “gestionar sin recursos es difícil”- pero, después de 3 años de protestas, no tener nada concreto previsto y desentenderse de nuestra presencia no las sostiene. Las palabras ya no sirven. Sólo sirven los actos.

Las administraciones públicas tienen la obligación legal y la responsabilidad de proveer de asistencia sanitaria a la población madrileña. Su abandono de esta responsabilidad es inadmisible y una grave vulneración de los derechos fundamentales de nuestros vecinos y vecinas. Es un ataque contra nuestro derecho a la salud.

La situación en la que nos encontramos los y las usuarias cuyo centro de salud de referencia es el Centro de Salud de Abrantes contrasta con la que se da en otros centros de salud que no tienen las enormes carencias que afrontamos aquí. Este hecho supone una marcada e injustificable discriminación hacía nosotros y nosotras que vulnera el principio básico de la igualdad.

Aunque la situación del CS Abrantes es brutal, somos conscientes de que no va a tener salida sino revertimos el abandono generalizado de la Atención Primaria, por eso llamamos al vecindario de Carabanchel a luchar por una sanidad pública, universal y de calidad, no sólo para el barrio, sino para toda la Comunidad de Madrid.

Estamos hablando de una cuestión de derechos y de salud, ven la manifestación de este jueves 21 de diciembre.


Atención Primaria /