Redacción / Agencias •  Internacional •  09/04/2018

Carat, una empresa israelí que financió irregularmente al PP, lanza una criptomoneda respaldada por diamantes

La empresa israelí Carat presentó una nueva criptomoneda que pretende convertir los diamantes en un instrumento financiero y vencer la volatilidad de las actuales monedas digitales.

Se trata de una de las empresas que financió con dinero negro la campaña de Esperanza Aguirre y que ya apareció en la investigación del caso Gürtel

Carat, una empresa israelí  que financió irregularmente al PP, lanza una criptomoneda respaldada por diamantes

En la sede de la Bolsa de Diamantes de Israel, en la ciudad colindante a Tel Aviv, Ramat Gan, se presentaron dos nuevas criptomonedas el mes pasado: una para los trabajadores especializados en la industria del diamante, llamada «Cut», y otra para el público general, denominada «Carat».

Es el nombre de la empresa que aparece en el sumario de la causa Púnica donde figuran unas anotaciones realizadas presuntamente por Gutiérrez en las que se refleja una cita con CEIM junto al nombre de tres empresas que fueron proveedores del PP en aquellos actos, Sintra, Over y Carat. Al frente de esta última estuvo el que fuera portavoz del Gobierno Miguel Ángel Rodríguez con José María Aznar.

«Lo revolucionario de nuestras monedas es que por cada una de ellas que esté en el mercado nosotros tendremos un diamante real en una caja fuerte que la respalde», explicó Nadav Pearl, de Carats I.O, la empresa que junto con la Bolsa de Diamantes de Israel va a lanzar al mercado el próximo mes de mayo esta nueva divisa digital.

«A diferencia de bitcoin y otras ‘cripto’ de la generación anterior, que las miras por dentro y lo que ves son códigos, no tienen correlación física con el mundo real», agregó.

La moneda digital va a estar basada en diamantes comprados y acumulados en la Bolsa de Diamantes israelí, la mayor sede de intercambio de la piedra preciosa del mundo.

El interés que motiva a «Carat», según dijo Pearl, es el mismo que con las demás criptomonedas, el de llevar a cabo transacciones en una economía descentralizada:

«En esta economía centralizada, cuando haces transacciones con tu banco, lo haces a través de un servidor principal que es controlado por gente, cambiado y afectado por personas. Hay gobiernos monetarios decidiendo qué hacer con las monedas…, en el mundo de las «cripto» nadie controla las transacciones».

Pero según Gabriel Diament, también de Carats I.O., «carat» tiene un valor añadido: el que le da el algoritmo que su empresa de jóvenes matemáticos ha encontrado para ponerle precio a los diamantes calculándolo a través de 14 parámetros relacionados con las piedras.

«No creemos que podemos poner precio a los diamantes de modo individual mejor que los comerciantes de diamantes, pero creemos que podemos hacerlo muy bien en términos generales: coger 100,000 diamantes, como hemos hecho, y eliminar los factores que existen en cualquier transacción, los psicológicos, y así hemos creado el algoritmo que precisa su precio», explicó Diament.

Israel exportó en 2017, siete mil millones de dólares en diamantes en bruto y tallados, aseguró la Bolsa de Diamantes.

Proceso Kimberley y el tercer mundo

Es un sistema de certificaciones diseñado para evitar que los diamantes conflictivos entren en el mercado de los diamantes. Se preparó para intentar garantizar a los clientes que no estaban financiando guerra ni abusos de los derechos humanos con la compra de diamantes. Entre un 99% y un 97% del mercado de diamantes tiene lugar entre países que forman parte del plan.

El KPCS surgió de una reunión de los estados productores de diamantes de África en Kimberley, Sudáfrica en mayo del 2000. En diciembre del 2000 las Naciones Unidas elaboró una resolución para la creación de un sistema de certificación que garantizara que los diamantes no habían sido vendidos para financiar guerras civiles. En Noviembre del 2002 el KPCS se pactó entre los países productores y compradores de diamantes y compañías que se dedicaban a la producción de diamantes, destacando De Beers y World Diamond Council. Angola asumió la presidencia pro témpore en el 2014.

Para que un país pueda participar debe asegurar:

  1. Que cualquier diamante originario del país no financie un grupo rebelde u otra entidad que tenga como objetivo la destitución de un gobierno reconocido por las Naciones Unidas.

  2. Que cada diamante que se exporte venga acompañado con un certificado que garantice que cumple con el Proceso de Kimberley

  3. Que no haya diamantes importados o exportados a un país que no forme parte del plan.

Este sencillo plan de tres pasos es para asegurar una «cadena» de países que negocien exclusivamente con diamantes que no sean diamantes conflictivos(diamantes de sangre).

En 2004, El Congo fue expulsado del sistema de certificación debido a que fue incapaz de probar el origen de sus diamantes. Para países económicamente dependientes de la exportación de diamantes, este es un castigo sustancial ya que le impide vender sus diamantes con una gran parte del resto del mundo.

Derechos Humanos y el proceso kimberley

Mientras el proceso ha sido bien recibido por grupos interesados en mejorar la situación de los derechos humanos en países donde antes estaban afectados por los diamantes de zonas en conflicto, como puede ser Angola, algunos sugieren que todavía no se ha llegado suficientemente lejos. Por ejemplo, Amnistía Internacional dice:

Damos la bienvenida al proceso de Kimberley como un gran paso en la gestión del problema de los diamantes conflictivos. Pero hasta que el comercio del diamante este sujeto a un control obligatorio e imparcial, no habrá garantías efectivas que todos los diamantes sean identificados y retirados del mercado.

La organización canadiense One Sky coincide con el punto de vista de Amnistía Internacional asegurando:

«Implementado de una manera efectiva, el Proceso de Kimberley, se garantiza que los diamantes no puedan usarse para financiar guerras y atrocidades… Aun así, sin un sistema de revisiones expertas, independientes y periódicas de todos los países, la totalidad del proceso queda vulnerable al abuso.

Un ejemplo de abuso podría ser el contrabando de los diamantes conflictivos de un país sin certificación a un país certificado, tanto para hacerlos pasar ante los demás países como diamantes propios y exportarlos, como para su distribución y venta dentro de ese país. El problema radica en que en alguna de las etapas de exportación del producto, el proceso sea violado y se introduzcan diamantes conflictivos(diamantes de sangre).

Sin embargo, a pesar de las críticas, el proceso ha logrado disminuir significativamente el número de diamantes conflictivos vendidos y ha ayudado a terminar una serie de conflictos incluyendo la Guerra Civil Angoleña.

Naciones que participan en el proceso

  1. Angola

  2. Armenia

  3. Australia

  4. Bielorrusia

  5. Botsuana

  6. Brasil

  7. Canadá

  8. Chile

  9. República Centroafricana

  10. Costa de Marfil

  11. Los 28 países miembros de la Unión Europea

  12. Estados Unidos

  13. Ghana

  14. Guinea

  15. Guyana

  16. India

  17. Israel

  18. Japón

  19. Corea del Sur

  20. Laos

  21. Líbano

  22. Lesoto

  23. Malasia

  24. Mauricio

  25. México

  26. Namibia

  27. Noruega

  28. Panamá

  29. Rusia

  30. Singapur

  31. Sierra Leona

  32. Sudáfrica

  33. Sri Lanka

  34. Suiza

  35. Tanzania

  36. Tailandia

  37. Togo

  38. Ucrania

  39. Emiratos Árabes Unidos

  40. Venezuela

  41. Vietnam

  42. Zimbabue

Una argumentación geopolítica para la creación de una criptomoneda israelí:

En primer lugar… evadir al proceso Kimberley: mediante,la legitimación de Capitales, luego podría ser, financiar a la Industria armamentísca israelí, la construcción en el desierto del neguev de más armas nucleares para un futuro conflicto del ejército sionista, contra la República Islámica de Irán.


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