ACNUR •  Redacción •  Internacional •  20/06/2016

Los sindicatos europeos exigen ayuda humanitaria y derechos para los refugiados

Una delegación de CCOO encabezada por el secretario general, Ignacio Fernández Toxo, ha participado en la Acción europea por los refugiados organizada por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) en Roma. En este encuentro, al que han asistido alrededor de 250 sindicalistas de diferentes países de Europa, Toxo ha pedido una actuación conjunta del movimiento sindical europeo para exigir a la UE políticas que pongan a las personas por encima de los intereses económicos y electoralistas, advirtiendo de que “con las personas que se ahogan en el Mediterráneo, se pueden estar ahogando los valores de la UE”.

Los sindicatos europeos exigen ayuda humanitaria y derechos para los refugiados

En el encuentro han intervenido el secretario general de la CESLuca Visentini; el secretario general de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Lamberto Zannier; el representante regional adjunto de ACNUR en el sur de Europa,Roland Schilling; el presidente del Comité Económico y Social Europeo (CESE), Georges Dassis; y finalmente, varios dirigentes sindicales europeos.

El movimiento sindical europeo ha presentado una Declaración exigiendo ayuda humanitaria y derechos para los refugiados, advirtiendo del desafío que representa para los valores de la Unión Europea la llegada masiva de solicitantes que mayoritariamente huyen de la violencia y los conflictos en Siria, Irak o Afganistán. De hecho, se reprocha la falta de cumplimiento por parte de Europa de sus obligaciones internacionales de protección a los refugiados. Se recuerda que sólo en lo que va de año, más de 1.500 personas han muerto en el Mediterráneo, más de 5.000 en los últimos 18 meses. Se critica también el fracaso de las políticas de reasentamiento.

La Declaración contiene, además, una serie de demandas a los gobiernos nacionales, entre ellas: terminar con cualquier práctica que ponga en peligro la dignidad humana y la integridad física de los seres humanos; abandonar el acuerdo UE-Turquía; defender el acuerdo Schengen como un logro fundamental en la construcción europea; poner fin a las políticas de austeridad, y apoyar a las personas que trabajan día a día para garantizar una vida segura y digna a los solicitantes de asilo, incluidos los funcionarios.

En el texto se reclama asimismo el cumplimiento con la legislación internacional en materia de asilo y refugiados; la revisión del Reglamento Dublín III; una ayuda más eficaz en origen, incluida la intervención para la restitución de la paz, y destinar más recursos para el rescate de personas y de esa manera, evitar tantas muertes en el mar.

Por su parte, los sindicatos se comprometen, entre otras cosas, a apoyar políticas que favorezcan la creación de empleo, también para los refugiados, y a exigir mayores fondos europeos para los países receptores de refugiados.

La Declaración concluye recordando que con sus 45 millones de afiliados, el movimiento sindical europeo sigue siendo un bastión contra todas las formas de intolerancia y se compromete a seguir presionando para conseguir respuestas humanitarias a una crisis humanitaria.

En su intervención, el secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, ha mencionado el acto celebrado el día 14 en Madrid: SOS Refugiados, Acto de la Sociedad y la Cultura, previo a la manifestación convocada para el 20 de junio. Fernández Toxo señaló que el tema de los refugiados no sólo compete a los gobiernos, toda la sociedad está implicada y muy especialmente los sindicatos. En este sentido, ha pedido una actuación conjunta del movimiento sindical europeo, que debe dejar de lado las diferencias. En relación al Derecho de asilo, el secretario general de CCOO, ha insistido en que no caben dudas sobre su aplicación “se trata de un Derecho fundamental recogido en las Convenciones Internacionales”, ha dicho. Toxo ha reclamado una política común de la UE en relación, especialmente al asilo, pero también a los refugiados. Ha criticado a quienes tratan como mercancía a las personas que mueren en el Mediterráneo y ha pedido al movimiento sindical europeo que exija políticas que pongan a las personas por encima de los intereses económicos y electoralistas. Ha señalado la necesidad de que la UE recomponga las políticas de cooperación para garantizar el desarrollo económico democrático de los países y no sólo para el beneficio de los capitalistas. Ha pedido que la UE garantice que situaciones como las del gueto de Varsovia o la persecución de los republicanos españoles, no vuelvan a repetirse. Ha concluido su intervención advirtiendo de que “con las personas que se ahogan en el Mediterráneo, se pueden estar ahogando los valores de la UE”.

Otros dirigentes sindicales europeos han señalado la necesidad de acabar con las políticas de austeridad de manera que los Estados puedan asegurar la acogida de los refugiados garantizándoles condiciones sociales dignas. Además, han insistido en el papel fundamental de los sindicatos en la integración de los refugiados en el mercado laboral en condiciones de trabajo iguales a los trabajadores locales.

Hay que señalar la ausencia de representantes de alto nivel de los sindicatos nórdicos, así como del sindicato británico TUC. Tampoco representantes del gobierno italiano, incluido el primer ministro Renzi, a quien se había solicitado un encuentro con los dirigentes sindicales europeos, participaron finalmente en el encuentro.


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