El ‘boom’ de las renovables le explota en la cara a Miguel Ángel Revilla: rechazo total de la espeleología cántabra al parque eólico Garma Blanca
La Federación Cántabra de Espeleología (FCE), entidad de reconocido prestigio a nivel internacional por la calidad y cantidad de cuevas con las que cuenta la comunidad autónoma, ha presentado alegaciones al proyecto ante la inasumible afección del mismo, que afectará a 388 cavidades en un radio de cinco kilómetros del perímetro de la infraestructura. Además, considera que la instalación de aerogeneradores «pondrá en peligro directo a más de 60 cavidades y 49 surgencias de agua».
La FCE tiene un conocimiento profundo de la zona donde está prevista la instalación del parque eólico de 51 MW impulsado por por Capital Energy a través de su filial Green Capital Power S.L., ya que se trata de un área que está siendo explorada «desde hace décadas» por distintos grupos de espeleólogos tanto nacionales como internacionales.
Así, según informa la entidad, de las 388 cuevas que se verán afectadas por el proyecto, 9 están catalogadas como Bien de Interés Local pertenecientes a Zona Arqueológica Protegida, además del sistema del Ato del Tejuelo, que con sus más de 170 kilómetros de longitud «es uno de los 20 sistemas de cavidades con más desarrollo del mundo, el tercero más grande de Europa y el primero de España».
PERPLEJIDAD ANTE LA FALTA DE CAUTELA
Sin embargo, la FCE ha observado con «perplejidad» que «pese a existir un registro de dichas cavidades este no ha sido consultado por la empresa promotora del parque eólico», que ha basado la documentación cartográfica del proyecto «en una publicación de hace más de diez años». Para el colectivo «no se entiende que un proyecto de tal magnitud se base en una documentación claramente incompleta y con un vacío de información de diez años» dado que en este tiempo, «los distintos grupos que exploran la zona afectada han sumado más de 100 kilómetros de nuevas cavidades y simas, conformando una de las zonas con mayor número de cuevas de Europa».
ELEVADO IMPACTO AMBIENTAL DEL PROYECTO DE CAPITAL ENERGY
La FCE también subraya que la construcción del parque eólico Garma Blanca «podría contaminar de forma inmediata los acuíferos», algo que «repercute directamente en las aguas subterráneas que salen a los pueblos y se vierten, casi en su totalidad, al río Miera».
Además, para la Federación «están las afecciones a la fauna subterránea y quirópteros que provocará el proyecto eólico», un impacto reseñable «ya que los parques eólicos convencionales se han convertido en la primera causa de mortalidad de los murciélagos a nivel mundial, reconociéndose que el número de ejemplares muertos es además notablemente superior al de las aves».
La entidad recuerda que «durante varios millones de años, especies cavernícolas como los diplópodos Cantabrodesmus lorioli han vivido en las cavidades de Cantabria, territorio considerado como un punto caliente de biodiversidad subterránea al norte de la península ibérica, por el alto número de especies endémicas (cerca del 60%) y por la gran extensión y grado de conservación de los paisajes calizos kársticos, que son particularmente propicios para albergar una fauna subterránea», hecho que «tampoco se ha tenido en cuenta» en la documentación sometida a información pública».
Finalmente, la FCE «pide que se tengan en cuenta las alegaciones presentadas y se paralice el proyecto», que consideran como «claramente perjudicial» para el patrimonio subterráneo de Cantabria, «uno de los más grandes e importantes» a nivel europeo y mundial.
Fuente: www.rebeldes.info
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