La vivienda se dispara como primera preocupación de los catalanes

La vivienda se consolida como el principal problema para la ciudadanía, según los nuevos datos del barómetro publicados hoy. En poco más de un año, la preocupación por la vivienda ha pasado del 7% al 31%, y 1 de cada 3 catalanes la señala ya como el problema más grave que afronta el país. El barómetro se hace público un año después de la movilización del 23N, cuando 170.000 personas se manifestaron en Barcelona bajo el lema: “Bajemos los alquileres”.
Los datos disponibles muestran claramente que la vivienda es un problema transversal que afecta a todas las edades y perfiles. Entre la población joven, la situación es especialmente alarmante: el 44% de las personas de entre 25 y 34 años señala la vivienda como su principal preocupación, muy por encima del resto de problemas sociales y económicos. Pero en todas las franjas de edad es el principal problema, duplicando o triplicando al que ocupa la segunda posición. La vivienda es asimismo el primer problema para los votantes de todas las fuerzas políticas excepto las dos de extrema derecha, así como entre las personas abstencionistas.
1⃣ La preocupació per l’habitatge passa del 7% a 31% en poc més d'un any per als simpatitzants de la majoria de partits. És amb diferència el problema més important a totes les franges d’edat. pic.twitter.com/ayVHr5d2Xe
— Sindicat de Llogateres i Llogaters (@SindicatLloguer) November 24, 2025
Se destina un 40% a pagar el alquiler y aumentan un 44% los alquileres temporales
Este aumento sostenido de la preocupación coincide con un año marcado por las mayores movilizaciones en defensa de la vivienda vistas en Cataluña y el Estado. Aunque la regulación del precio del alquiler ha logrado frenar la escalada de precios, la población que vive de alquiler destina un 40% de sus ingresos al pago de la renta. Además, la falta de regulación en los alquileres temporales y de habitaciones está incentivando a los grandes tenedores a no renovar contratos. Esto provoca expulsiones y una situación de permanente inestabilidad para quienes viven de alquiler, en un año en el que se prevé que finalicen más de 150.000 contratos en Cataluña.
La modalidad de alquileres temporales y de habitaciones, utilizada para esquivar el tope de precios, está creciendo de forma exponencial. Entre 2023 y 2024, el número de alquileres temporales firmados en Cataluña aumentó un 44%. En ciudades como Barcelona, en 2024 representaron un 20% del total de nuevos contratos. El panorama en las plataformas de anuncios es aún más desolador: en Barcelona, 7 de cada 10 anuncios de pisos en alquiler son en modalidad de temporada, que además de tener una duración corta, quedan fuera de regulación y suelen duplicar los topes del índice.

Junts vuelve a ser el obstáculo en la recta final para regular los alquileres de temporada
Desde el Sindicat de Llogateres alertamos de que esta preocupación no es coyuntural: a pesar de que gobiernos y partidos han anunciado medidas para poner fin al problema de la vivienda, en la práctica la ciudadanía no percibe una mejora. Un ejemplo claro es la regulación de los alquileres temporales y de habitaciones, principal vía de desvío de viviendas hacia otros usos y causa directa de la subida del alquiler.
La semana pasada, el texto para regular los alquileres de temporada y de habitaciones impulsado por los Sindicatos de inquilinas recibió el apoyo de ERC, Bildu, Sumar, Podemos, BNG, PSOE y PNV en la Comisión del Congreso. Para su aprobación en el Pleno, sin embargo, será necesario que Junts per Catalunya no vote en contra.
Es importante destacar que la última encuesta monográfica sobre vivienda del CEO señaló que los votantes de Junts son quienes peor valoran las propuestas de vivienda de su propio partido (con una nota media de 6,2). Estos mismos votantes consideran más cercanas las propuestas del PSC y ERC, además de las propias.

Los inquilinos: más dispuestos a movilizarse y plantar cara
Ante la desconexión entre las preocupaciones de la ciudadanía y la respuesta de las instituciones, cada vez más personas se están uniendo al Sindicat de Llogateres, que ha tenido un incremento del 25% de personas afiliadas en el último año, y al movimiento por la vivienda. El ciclo de movilizaciones iniciado el curso pasado continúa vivo con la lucha de bloques de inquilinas en todo el país, la huelga de alquileres contra la Fundación La Caixa y las convocatorias de las próximas semanas. El 29 de noviembre se prepara un acto de apoyo a la huelga en L’Hospitalet de Llobregat y el 17 de diciembre una movilización ante la sede de la Fundación La Caixa.
