Plataforma Stop Instituto Confucio •  Opinión •  07/07/2017

Instituto Confucio, un lobo con piel de cordero

Instituto Confucio, un lobo con piel de cordero
Cada vez más, es creciente la preocupación y la alerta ante la próxima apertura de un Instituto Confucio (IC) del gobierno chino en Zaragoza. En España existen 6 institutos y 9 aulas Confucio en operación. En mayo Documentos TV emitió en La2 el documental «El dragón de las mil cabezas«, exponiendo toda la polémica del espionaje que ha realizado el régimen chino en otros países. En este documental la inteligencia canadiense declara al Instituto Confucio como una herramienta de espionaje e influencia.
 
El 25 de septiembre está prevista la apertura en la Facultad de Educación de un IC para “enseñar cultura y lengua chinas” a los habitantes de Zaragoza. En Toledo está previsto el comienzo del programa el 10 de julio en el Palacio de Lorenzana. Las controversias que están alrededor de dicho Instituto abarcan desde la violación de la libertad de cátedra y de creencia, hasta la influencia extranjera que podría poner en peligro la seguridad nacional. No es similar a un Instituto Cervantes, porque el IC depende directamente del régimen chino y no dispone de sus propias instalaciones. El IC se adhiere a las instalaciones de un organismo extranjero ya asentado como es la universidad para tener acceso directo a sus estudiantes, que serán futuros líderes en el país extranjero. Quieren crear una imagen benigna del régimen chino en los jóvenes extranjeros, para que el régimen chino gane influencia en el escenario mundial. No trabajan a corto plazo, sino a largo plazo, es el Caballo de Troya.
 
Xu Lin, directora de los Institutos Confucio, viceministra y miembro del Consejo de Estado de la R.P. China, ordenó en 2014 a su personal arrancar las páginas de un programa en una conferencia educativa en Portugal (se ofendió por el copatrocinio de una fundación taiwanesa). El mismo año, Xu Lin se vio envuelta en una polémica al presionar junto con su gabinete durante más de una hora a los reporteros de la BBC para que borrasen una entrevista donde le habían preguntado por el incidente de Portugal. Cuando la Universidad de Chicago se dispuso a cerrar su Instituto Confucio, la señora Xu Lin lanzó amenazas por teléfono y por escrito a la universidad. Según el Business Spectator, la ofensiva carismática de Pekín “todavía recae en funcionarios como Xu, que todavía piensa y actúa como ideólogos del Partido que gustan de afirmar su autoridad y acosar a la gente hacia la sumisión”. Xu Lin ha sido premiada con la Medalla Conmemorativa del 475 aniversario de la Universidad de Zaragoza, vergonzoso.
 
En un vídeo recogido en el documental «En el nombre de Confucio», Xu Lin afirmó: «no hemos perdido la soberanía educativa. Estoy realmente orgullosa de este modelo, es como si las universidades extranjeras trabajasen para nosotros». Aparentemente la universidad y el ente del régimen chino que controla el IC colaboran en igualdad de peso y condiciones, pero la universidad extranjera suele contribuir en especie, pagando al personal español del IC y ofreciendo las instalaciones. El régimen chino aporta cerca de 150.000€ a la universidad, ¿quién criticará a una dictadura una vez que acepte en su bolsillo dinero de ella? Según el convenio para crear un Instituto Confucio en Zaragoza, la Universidad de Zaragoza asume que será competencia del organismo chino determinar los proyectos patrocinados por el organismo del gobierno chino. De esta forma estamos dejando que el gobierno dictatorial chino se introduzca en nuestro sistema educativo, ¿qué valores nos querrán imponer? También el convenio estipula que ambas partes deben tomar el convenio como «confidencial» y no difundirlo a un tercero. En una universidad sostenida con fondos públicos de la ciudadanía, cualquier convenio debe ser público, y no es normal que se haya tenido que recurrir a la ley de transparencia de Aragón para obtenerlo. El convenio con la universidad colaboradora china para enviar profesores chinos al IC en Zaragoza reza que facilitará uno o dos profesores. Dichos profesores, ¿serán reclutados de los estudiantes de la universidad que, como Sonia Zhao, tuvieron que firmar un contrato laboral que prohíbe a los practicantes de Falun Gong ser profesores?
 
Falun Gong es una práctica espiritual que fue muy popular en China en los años noventa, pero que en 1999 comenzó a ser perseguida por el Partido Comunista Chino, temeroso de su popularidad. Los practicantes han sido objeto de persecución por el régimen, quien ha detenido a cientos de miles de practicantes, los somete a diversas torturas y en algunos casos, los asesina para extirparles los órganos de una manera forzada.
 
Los IC no son la gallina de los huevos de oro, son más bien un lobo con la piel de cordero, como ha demostrado durante todos estos años el actuar del PCCh, un régimen dictatorial que ha sido condenado en múltiples naciones civilizadas por violar gravemente los derechos humanos. ¿Realmente las universidades ganan prestigio con el IC? Las universidades de Lyon, Estocolmo y Stuttgart han cerrado junto a otras sus IC. La máxima representante de los IC ha declarado públicamente que “los IC son una parte importante de nuestro poder diplomático, queremos expandir la influencia de China”. No podemos dejar que nuestra independencia en educación se vea afectada, las pruebas ya son suficientes para decirle no al Instituto Confucio. Por todo ello, no queremos de ninguna manera que en la enseñanza pública se vean comprometidas las libertades académicas que garantiza nuestra Constitución de 1978.
 
 

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