El oficio de sirvienta
Últimamente defensores de derechos humanos nos llaman asistentes domésticas, para aminorar el golpe, pero a las cosas por su nombre: somos sirvientas, nuestro oficio es servir.
Últimamente defensores de derechos humanos nos llaman asistentes domésticas, para aminorar el golpe, pero a las cosas por su nombre: somos sirvientas, nuestro oficio es servir.
Para entender lo que sucede en estos momentos en Venezuela, tenemos que retroceder 15 años, y ver a las oligarquías pataleando cuando se quedaron sin los millones que producía la venta del petróleo a empresas extranjeras. El ecocidio que producían empresas transnacionales con sus minerías, que empobrecían más a las comunidades y llenaban las cuentas bancarias de los contrabandistas en el poder. La violencia institucionalizada y la explotación contra la clase trabajadora. Los pobres más pobres y los ricos más ricos.
Me atrevo a escribir estas líneas con la responsabilidad de llevar a los medios de comunicación, la voz de los pueblos de América Latina que le han apostado a un modelo político progresista.