Redacción •  Negocios y Ocio •  16/05/2025

La huella digital: tu rastro en internet para todo

La huella digital: tu rastro en internet para todo

A estas alturas has oído hablar de la huella digital sin acabar de entender bien a lo que se refería este concepto tan ligado a la tecnología. La huella es el rastro que se deja al navegar en internet con todos tus datos. Cada clic, búsqueda, publicación o compra lo alimenta. Sin que lo sepas, esta información puede recopilarse y usarse por terceros.

Al navegar por páginas web o realizar búsquedas, se deja un historial que puede ser fácilmente rastreado. Además, los datos personales como el nombre, el correo electrónico, el historial de navegación, las compras realizadas y la ubicación del dispositivo configuran tu huella digital.

La importancia de proteger tu huella digital

La huella digital es muy útil si se sabe proteger. Póngase como ejemplo, la solicitud de un préstamo rápido y fácil en una entidad financiera. Esta requiere usuario y contraseña para formalizarse, pero la huella digital juega un papel clave al facilitar el acceso inicial a la plataforma desde cualquier dispositivo.

Gracias a este método, el usuario puede entrar de forma inmediata y segura, sin necesidad de recordar claves ni pasar por procesos lentos. Así, no solo mejora la experiencia, sino que también acelera los primeros pasos para obtener financiación de forma cómoda y eficiente.

Para quedarse solo con las ventajas de la huella digital, hay que tener en cuenta una serie de factores. Protegerla es esencial para mantener la privacidad y seguridad en línea. Al minimizar el rastro que se deja, se reduce el riesgo de ser víctima del fraude, suplantación de identidad o robos de datos.

Consejos para reducir tu huella digital

Ante todo, sé cauteloso y actúa siempre con prudencia cuando navegues en internet. Desde la página Finanzas para todos, se ofrecen consejos para que puedas quedarte solo con las ventajas de este rastro que, con un buen uso, te hará el acceso a los sitios web más fáciles.

1. Cuenta de correo alternativa en lugar de la personal

Para registrarte en sitios web sin utilizar siempre tu correo personal, considera crear una cuenta de correo específica para este propósito. Esto limita la exposición de tu información personal y reduce el riesgo de recibir correos no deseados. De este modo, tendrás dos cuentas en activo cada una para unos propósitos.

2. Elimina cookies, caché e historial con frecuencia

Las cookies y el historial de navegación almacenan información sobre tus actividades online. Eliminarlos periódicamente ayuda a proteger tu privacidad y a mantener tu dispositivo funcionando de manera eficiente. Hazlo por lo menos una vez a la semana y si puedes un par, mejor.

3. Escoge el modo incógnito para navegar

Actualmente, los navegadores disponen de un modo incógnito. Esta opción impide que se guarde información sobre las páginas web que visitas, las contraseñas o los datos que metes en distintos tipos de formularios. Es una herramienta útil para mantener tu actividad privada.

4. Configura la privacidad en redes sociales

Si eres usuario de redes de sociales, es el momento de revisar y ajustar la privacidad en todas ellas. Hay opciones que debes revisar para limitar el acceso a tus fotos, publicaciones y cualquier información personal. Nunca debes compartir datos sensibles como tu ubicación o los viajes que haces, menos en tiempo real.

5. Fíjate si las webs son seguras

No todas las páginas webs son seguras ni mucho menos. Cuando entres en una, asegúrate de que tenga el protocolo HTTPS y un certificado digital válido, sobre todo cuando ingreses contraseñas o datos bancarios. Esto garantizará que la información transmitida esté cifrada y protegida.

6. Geolocalización ¡nunca!

Tener la geolocalización activada está bien… a veces, pero las aplicaciones y dispositivos pueden rastrear tu ubicación sin dificultad alguna. Desactivarla cuando no sea necesaria ayuda a proteger tu privacidad y a evitar que tu ubicación sea compartida sin tu consentimiento.

7. Extensiones de navegador y VPN

Existen extensiones que bloquean sitios web fraudulentos y anuncios intrusivos, lo que ayuda a mantener tu actividad online en el anonimato y a protegerte de amenazas cibernéticas. Por otra parte, una Red Privada Virtual (VPN) cifra tu conexión a internet, protegiendo tus datos de posibles ciberataques y aumentando la privacidad.

En definitiva, la huella digital es una prolongación de tu identidad online. Protegerla resguarda tu privacidad y tiene impacto directo en muchas operaciones. Si sigues estos consejos y eres consciente de la información que compartes, tendrás el control de tu vida digital y minimizarás riesgos innecesarios.