Razones por las que se deberían cursar estudios de especialización en enfermería

Lo que se conoce como formación continua, un término moderno y que tiene que ver mucho con la realidad de los trabajos actuales, es precisamente optar por mantenerse siempre estudiando para adaptarse a los nuevos tiempos, a cargos más dinámicos, a la posibilidad de crecer en la profesión y, por ende, de tener cada vez mejor calidad de vida.

Conocimientos especializados en un área

Todos los profesionales de la salud son conscientes de que su trabajo es adaptable a la mayoría de las situaciones donde son requeridos. Pero también son conscientes de que sus talentos y vocaciones pueden tener una inclinación hacia cierta área de su trabajo, desde cuidados intensivos, geriatría o neonatología, entre muchos otros.

Estudiar un Master Enfermería, por ejemplo, puede permitir que se adquieran nuevos y mejores conocimientos, tanto teóricos como prácticos, que le permitirán ampliar mucho su capacidad de actuación ante las situaciones del día a día, haciendo sus jornadas más productivas, por ende, se podrá conseguir un mejor trabajo o apalancar la carrera enormemente.

Condiciones laborales

En general, sin distinción de profesiones, existe una diferencia de entre un 20 y un 40% en lo relativo al salario, entre los profesionales que solo tienen titulación de grado, y aquellos que han optado por seguir estudios de especialización.

Por esa sencilla razón, toda formación, más allá de la básica para titularse como enfermero o enfermera, compensa. Si a eso se le añade, aparte del aumento económico, un cambio de cargo y responsabilidades, las condiciones laborales mejoran mucho más de lo que los números puedan indicar.

Currículum mejor cotizado

Hay muchos sectores profesionales donde actualmente es posible trascender sin titulación, las nuevas tecnologías han abierto oportunidades en ese sentido. Pero carreras tradicionales, como la enfermería, requieren disponer de un currículo y una formación especializada, por tratarse de un trabajo crítico y con una importancia enorme.

El currículum, entonces, cuanto mejor cotizado esté, mejores oportunidades laborales ofrecerá. Y la formación continua es la mejor manera, ya sea desde pequeños cursos cortos y hasta la formación en un máster o un doctorado, porque ofrece nuevos créditos, pero al mismo tiempo plasma que la persona poseedora de ese CV es un profesional cualificado, formado en las mejores instituciones y capacitado para llevar adelante trabajos de alto nivel.

Lo anterior también es válido para los momentos en los que alguien se quiera presentar a unas oposiciones. Obtener un puesto de trabajo en alguna institución pública garantiza una carrera sólida y estable, y cuanto mejor sea la formación, más puntos se conseguirán en las fases de mérito que todas las oposiciones tienen -y también no pocos procesos de selección de instituciones privadas-.

La profesión cambia

Puede parecer que la enfermería es una profesión que desde hace décadas requiere los mismos conocimientos y el mismo perfil de talento, pero no es totalmente cierto. Los métodos de cuidado, los fármacos utilizados, las metodologías de interacción con los pacientes, y hasta las formas de trabajar en áreas críticas han cambiado enormemente, y lo siguen haciendo cada día.

Lo obsoleto también le atañe a carreras como la enfermería, y la mejor manera de que los profesionales de este sector puedan mantenerse a la vanguardia de su profesión, es precisamente mediante la formación continua, que hoy incluso es más fácil, ya que es posible estudiar total o parcialmente por internet, porque hay mucha variedad de instituciones adscritas a universidades reconocidas internacionalmente, y existen muchas facilidades para acceder y aprovechar estas oportunidades. Lo ideal, por supuesto, es no conformarse nunca con el título de grado y siempre aspirar a la excelencia, que viene dada con la experiencia y la formación continua, a partes iguales.