Redacción •  Internacional •  31/01/2017

IU solicita un debate en el PE sobre la situación de los derechos humanos en EEUU tras los primeros anuncios de Trump

La Eurocámara “tiene una oportunidad de oro para dejar de utilizar los derechos humanos como una herramienta interesada de política internacional y dejar de agachar la cabeza porque se trate de Washington”, señala Marina Albiol.

IU solicita un debate en el PE sobre la situación de los derechos humanos en EEUU tras los primeros anuncios de Trump

La portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, ha solicitado introducir en la agenda del próximo pleno de Febrero un debate sobre la situación de los derechos humanos en EEUU, después de que el nuevo presidente, Donald Trump, firmara el decreto presidencial para construir un muro de 3.100 kilómetros en la frontera con México e hiciera unas declaraciones “lamentables” sobre el uso de la tortura.

“Trump es una amenaza para los estándares globales de derechos humanos. Sus planes migratorios ahondan y refuerzan la política xenófoba de la Europa fortaleza dando cobertura internacional a los muros y vallas construidos en Hungría, o en el Estado español en Ceuta y Melilla”, señala.

Albiol cree que Trump parece “haberse inspirado” en las políticas migratorias europeas, “y ha decidido intensificarlas y hacerlas aún más agresivas que las ya nefastas políticas del expresidente Barack Obama”, con decisiones como “la prohibición de conceder visados a las personas que tengan pasaporte de Irak, Siria, Irán o Libia”. Es de estos países “de donde proceden muchas personas con derecho a la protección internacional”.

Pero la eurodiputada de IU cree que la política migratoria no es sólo uno de las amenazas para los derechos humanos que representa Trump en EEUU. “Sus declaraciones sobre la tortura contravienen el derecho internacional. Entendemos que una institución como la Eurocámara, que dice estar comprometida con el respeto de los derechos humanos, debería condenar este tipo de discursos y no agachar la cabeza por tratarse de EEUU”, advierte.

En su opinión, el Parlamento Europeo tiene ante sí “una oportunidad de oro para dejar de utilizar los derechos humanos como una herramienta interesada de política internacional y empezar a tomárselos en serio”.

Los gobiernos de EEUU, denuncia, “tienen a sus espaldas miles de crímenes de guerra en terceros países, historias de tortura, ejecuciones extrajudiciales, invasiones militares y detenciones ilegales sistemáticas sin que Europa haya dicho nunca nada. Ante el fascismo de Trump, que parece preocuparles mucho más que las prácticas de otros presidentes, la UE no puede seguir callada”.


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