Crisis en Gaza: 1,5 millones de desplazados ante desastre por lluvias
Las lluvias invernales agravan la crisis en Gaza, mientras el bloqueo reduce la entrada de camiones de ayuda y profundiza el riesgo humanitario para 1,5 millones de desplazados.

Un millón y medio de desplazados en Gaza viven en condiciones humanitarias críticas debido a las lluvias, el colapso de los campamentos y la falta de refugios adecuados, según autoridades locales.
Al respecto, el director de la oficina de medios del gobierno en la Franja de Gaza, Ismail Al-Thawabta, afirmó que la situación se agrava con cada episodio de lluvia.
Cientos de miles de familias viven en tiendas de campaña deterioradas y dañadas por la guerra de exterminio y las inclemencias del tiempo, indicó. Asimismo, advirtió que el sector necesita 300 mil tiendas nuevas, mientras que solo ingresaron al enclave unas 20 mil.
Según recordó Al-Thawabta, la depresión anterior «inundó decenas de miles de tiendas de campaña y convirtió los campamentos en zonas inundadas de barro y agua».
Más de 22 mil resguardos temporales resultaron completamente dañadas. Las lonas, los materiales aislantes y las mantas quedaron inutilizables. También colapsaron refugios de emergencia y se interrumpieron redes de agua temporales, que se mezclaron con el agua de lluvia.
Para agravar la situación —relató el funcionario— diez puntos médicos móviles quedaron fuera de servicio y se perdieron suministros vitales.
Los desplazados carecen de protección frente al frío, el viento y la lluvia, lo que profundiza la vulnerabilidad de la población.
Aumento del riesgo sanitario en los campamentos
En este contexto, la UNRWA advirtió que las precipitaciones en la Franja de Gaza traen nuevas dificultades y agravan las ya terribles condiciones de vida.
La agencia afirmó que el frío, el hacinamiento y la falta de higiene aumentan también el riesgo de enfermedades e infecciones.
Según describió el corresponsal de Al-Mayadeen en Gaza, la catástrofe es inminente, marcada por el asedio, la hambruna y una depresión climática severa.
«Todas las tiendas alcanzadas por la lluvia se inundaron. La situación es extremadamente catastrófica, especialmente en Al-Mawasi», detalló el periodista.
El aparato de Defensa Civil carece de capacidad operativa luego de la destrucción de su equipo. Algunas tiendas fueron inundadas y arrancadas por los vientos en medio de continuos bombardeos de artillería al este de Gaza y Khan Yunis.
Bloqueo a la ayuda humanitaria y cifras cuestionadas
En ese contexto, la Oficina de Prensa del Gobierno en Gaza calificó como engañosas las declaraciones del embajador estadounidense ante la ONU, Mike Waltz, quien habló sobre la entrada de 600 camiones diarios al sector.
La entidad dejó claro que «Israel» pone en práctica una «metodología precisa» para obstruir la entrada de ayuda humanitaria.
Desde la implementación del cese al fuego, solo ingresaron al sector 14 mil 534 camiones de los 37 mil 200 previstos. El promedio diario no supera los 234 transportes de carga y el índice de cumplimiento es de 39 por ciento.
Hace dos días, la oficina informó que en los últimos 60 días penetraron al enclave solo 13 mil 511 camiones de los 36 mil previstos, con un promedio de 226 diarios, equivalente a un 38 por ciento.
La escasez de alimentos, medicamentos, agua y combustible se mantiene y profundiza el deterioro humanitario en Gaza, explicó.
Asimismo, remarcó la oficina que estas violaciones constituyen una peligrosa elusión del alto el fuego» y buscan imponer «una ecuación humanitaria basada en la subyugación, el hambre y el chantaje».
La ocupación es considerada responsable del deterioro de la situación humanitaria en un período que debería caracterizarse por un alto el fuego completo y sostenible.
La oficina instó a la comunidad internacional, a las Naciones Unidas, al presidente estadounidense Donald Trump, a los mediadores y garantes del acuerdo, a asumir sus responsabilidades legales y morales.
Solicitó garantizar el cumplimiento de las obligaciones humanitarias, la protección de civiles y el flujo de ayuda y combustible necesario para enfrentar la catástrofe en curso en la Franja de Gaza.
