Noruega se moviliza contra entrega del Nobel a María Corina Machado mientras que la RedH denuncia un premio “manchado de sangre”
Diversas organizaciones noruegas de paz y solidaridad se movilizan en Oslo para rechazar la entrega del Nobel de la Paz a María Corina Machado.
Una alianza de organizaciones noruegas dedicadas a la paz y la solidaridad anunció una manifestación para este martes 9 de diciembre, en rechazo a la decisión del Comité Nobel de otorgar el Premio Nobel de la Paz a la representante de la extrema derecha venezolana María Corina Machado.
Los colectivos señalaron que la galardonada respalda públicamente una intervención militar contra Venezuela, apoya las más de mil medidas coercitivas unilaterales impuestas al país y está vinculada a acciones violentas y desestabilizadoras.
También denunciaron que la decisión del Comité contradice el espíritu del testamento de Alfred Nobel, orientado a premiar esfuerzos por el desarme y la resolución pacífica de conflictos.
Asimismo, advirtieron que el reconocimiento podría legitimar una eventual intervención militar de Estados Unidos en América Latina, en contravención del derecho internacional.
La protesta, convocada frente al Instituto Noruego del Nobel, constituye una de las mayores articulaciones de colectivos noruegos en años para cuestionar públicamente una decisión del Comité.
Por su parte, la presidenta de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad, Gro Standnes, afirmó que un premio destinado a promover el diálogo no puede recaer en figuras que respalden acciones militares.
“Cuando el premio se concede a una política que apoya la injerencia militar y acciones contrarias al derecho internacional, se rompe con el propósito mismo del Premio Nobel de la Paz”, señaló la también miembro del Consejo Noruego por la Paz.
La asesora de información del Comité Noruego de Solidaridad con América Latina, Lina Álvarez Reyes, recordó que el presidente estadounidense Donald Trump amenazó abiertamente con lanzar una ofensiva militar contra Venezuela, en violación del artículo 2.4 de la Carta de Naciones Unidas.
Álvarez alertó que estas amenazas, junto con los ataques ilegales que Washington lleva a cabo en el Caribe, ponen en riesgo a la población civil, vulneran la soberanía venezolana y aumentan la inestabilidad en todo el continente.
“Es inaceptable que el Premio de la Paz se utilice para legitimar el uso de la fuerza ilegal de Trump en América Latina. Las intervenciones militares de Estados Unidos nunca han traído paz ni prosperidad a la región”, afirmó.
Durante la jornada de protesta se espera que destaquen consignas como: “¡No al Nobel para promotores de guerra!” y “¡Estados Unidos: manos fuera de América Latina!”.
Las organizaciones sostienen que la selección de Machado viola el mandato original del premio, que establece que el reconocimiento debe recaer en personas que promuevan la fraternidad entre naciones y la resolución pacífica de conflictos.
Entre los aspectos cuestionados señalan que la opositora venezolana dedicó el premio a Trump en un contexto de operaciones militares estadounidenses que constituyen ejecuciones extrajudiciales y violaciones del derecho internacional.
Critican que Machado difunda discursos belicistas al reproducir afirmaciones que describen al Gobierno venezolano como un “cártel narcotraficante”, pese a que tales acusaciones fueron desmentidas por agencias de inteligencia estadounidenses y figuras de la propia oposición venezolana.
En carta abierta rubricada por más de 200 intelectuales del mundo, la RedH denuncia que el Nobel de la Paz otorgado a María Corina Machado está “manchado de sangre”
La Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (RedH) rechazó la decisión del Comité del Premio Nobel de la Paz de otorgar el galardón a María Corina Machado, principal promotora de la guerra y de la desestabilización en Venezuela.
En una carta dirigida al Comité, la organización afirmó que la determinación contradice la búsqueda de paz en la región.
Igualmente señaló que la concesión del premio coincide con un escenario regional marcado por la presencia militar de Estados Unidos en el mar Caribe, donde operan portaaviones, buques de guerra, aviones de combate, helicópteros, misiles de largo alcance y submarinos nucleares, junto con miles de efectivos estadounidenses.
Esta situación —remarcó— representa una amenaza para la estabilidad continental.
Cuestionamientos al rol de Estados Unidos en la región
La RedH destacó que la Administración de Estados Unidos ha manifestado su intención de derrocar al Gobierno legítimo de Venezuela y apropiarse de sus reservas petroleras, estrategia que vulnera la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional.
El documento, rubricado por más de 250 intelectuales del mundo, también criticó que el Nobel recaiga sobre quien, afirman, respalda este tipo de acciones que han causado muertes en América Latina mediante operativos ejecutados bajo órdenes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
La RedH aseguró que dichos operativos han sido aplaudidos por la galardonada.
En la misiva, los intelectuales también mencionan los vínculos políticos de Machado con el primer ministro sionista, Benjamín Netanyahu, y su apoyo a las ofensivas impulsadas por “Israel”.
Tales posturas resultan incompatibles con los principios del Premio Nobel de la Paz y contradicen los compromisos regionales asumidos por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), que declaró a América Latina como zona de paz en 2014, aseveró la RedH.
Por esas razones el premio “llega manchado de sangre” y presentará como promotora de la paz en ceremonia solemne a una figura que aviva acciones militares y políticas que profundizan los conflictos.
En ese sentido, alertó sobre el uso simbólico del Nobel como “Caballo de Troya” para justificar intervenciones similares a las registradas en Libia, Afganistán, Irak y Siria.
Al cierre del documento, la RedH afirmó que, tras la ceremonia del 10 de diciembre, el Comité perderá autoridad moral para hablar de justicia o paz, términos que —remarcó— pertenecen a los pueblos que defienden su soberanía.
La representante de la extrema derecha venezolana llegó el lunes a Oslo, Noruega para recibir mañana 10 de diciembre el Nobel de la Paz.
En la nación eurpea, una alianza de organizaciones dedicadas a la paz y la solidaridad anunció una manifestación para este martes, en rechazo a la decisión del Comité Nobel.
Los colectivos señalaron que la galardonada respalda públicamente una intervención militar contra Venezuela, apoya las más de mil medidas coercitivas unilaterales impuestas al país y está vinculada a acciones violentas y desestabilizadoras.
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