Agencia Telesur •  Internacional •  06/08/2025

Investigadores argentinos protestarán contra la precarización del sistema científico

Los trabajadores del Conicet realizarán una protesta de 48 horas a partir del miércoles para denunciar el desfinanciamiento del sistema científico, la paralización de ingresos a la carrera de investigador y la pérdida del poder adquisitivo, además, exigirán salarios dignos, la continuidad laboral y presupuesto para investigar.

Investigadores argentinos protestarán contra la precarización del sistema científico

Los trabajadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) realizarán una protesta de 48 horas a partir del miércoles, debido al abandono y precarización del sistema científico en Argentina.

Bajo la consigna “Que esta no sea la última generación científica de Argentina”, la jornada de protestas incluirá un acampe frente al Polo Científico y Tecnológico en el barrio porteño de Palermo, sede del exministerio de Ciencia, también habrá charlas abiertas, un acto central, marcha de antorchas y una asamblea para definir los próximos pasos.

El trabajo del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) a bordo del buque Falkor —con transmisiones en vivo, hallazgos de nuevas especies marinas y el uso del robot submarino SuBastian— despertó un enorme interés público. Sin embargo, lejos de celebrarse en plenitud, este hito científico ocurre en medio de una profunda crisis presupuestaria del sistema de ciencia y técnica, profundizada por las políticas del Gobierno de Javier Milei.

Con salarios congelados y recortes generalizados, más de 10 mil investigadores y 11 mil becarios del organismo denuncian que su poder adquisitivo cayó un 40 % desde diciembre de 2023. Además, los ingresos a la Carrera del Investigador Científico están completamente paralizados.

“Hay una situación de desfinanciamiento total. Los reclamos se dan en un marco caracterizado por gente que se va por todos lados. El éxodo de becarios doctorales es masivo: al no haber altas en la carrera del investigador, se van. Se desarticulan grupos de investigación de una manera dramática en las distintas áreas de conocimiento. En 30 años de trayectoria, no he visto nunca algo como esto”, afirmó el inmunólogo Jorge Geffner.

A su vez, esta semana se debatirá en la Cámara de Diputados un proyecto para declarar la emergencia del sistema científico nacional.

Entre hallazgos submarinos y recortes en tierra: la otra cara de la ciencia argentina

Aunque cada nuevo descubrimiento en las profundidades marinas despierta entusiasmo y asombro, en tierra firme predomina un sentimiento de preocupación y desgaste.

Geffner describió con claridad el trasfondo del nuevo paro que se iniciará esta semana. “Los reclamos son los de siempre, pero se agudizan con el correr del tiempo. Hoy por hoy, a un año y medio de la asunción de Milei, no tenemos ni una sola nueva alta, está cerrada la carrera del ingreso al Conicet, el deterioro salarial es impresionante y la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (I+D+i) está absolutamente paralizada, es decir, no hay financiación”, denunció.

La situación dentro de la actual Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología (antes Ministerio de Ciencia) refleja un panorama desolador. Programas estratégicos como Equipar Ciencia y Construir Ciencia, orientados a mejorar equipamiento e infraestructura, quedaron eliminados.

Aunque existe una ley que garantiza un crecimiento progresivo del presupuesto para el sector, su cumplimiento ha sido ignorado. De acuerdo con esa normativa, el Estado debería destinar en 2025 un 0,45 % del PBI, pero la asignación actual apenas alcanza el 0,15 %. Para comparar, en plena crisis de 2002, la inversión llegaba al 0,17 %.

Ya meses atrás, el sector científico había salido a las calles bajo el lema de El Eternauta, como símbolo de resistencia. En aquella movilización, denunciaban que, entre jubilaciones, despidos y renuncias, el Conicet había perdido 1.500 trabajadores, sin que se produjera una sola incorporación.

También reclamaban por el bloqueo de los ingresos a la Carrera del Investigador Científico y por los más de 800 postulantes aprobados que no pudieron ingresar formalmente, a pesar de haber pasado las evaluaciones correspondientes.

Roberto Salvarezza, exministro de Ciencia de la Nación y actual titular de la Comisión de Investigaciones Científicas de la provincia de Buenos Airesestima que unos 4.000 investigadores de organismos como Conicet, INTI, INTA y otros, han abandonado sus actividades ante el derrumbe salarial.

En paralelo, las universidades públicas viven un proceso similar, donde docentes e investigadores dejan sus cargos para buscar alternativas laborales que les permitan sostenerse económicamente.


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