Argentina. A 35 años de la guerra de Malvinas, ex soldados combatientes denuncian las políticas entreguistas del gobierno de Macri
A 35 años de lo que fue el inicio del conflicto bélico en Malvinas el 2 de abril de 1982, las distintas organizaciones de ex combatientes de Malvinas, como la Asociación de Combatientes de Malvinas por los Derechos Humanos, el Centro de Ex Soldados Combatientes de Malvinas de La Plata, el Centro de Ex Combatientes de Malvinas Argentinas de La Plata, entre otras acompañados por varias personas y organizaciones políticas como el comedor Los Pibes, el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), MP La Dignidad, La Cámpora, Unidos y Organizados, realizaron un acto en Plaza de Mayo en homenaje a los soldados víctimas de la guerra y denunciando la campaña y discurso castrense macrista en el que intenta borrarlo del contexto en el que se situó basado la crueldad y tortura que sufrieron cientos de jóvenes que durante la dictadura fueron a combatir por las islas.
Y es por eso que en el mismo acto se rechazo el repudio que padecieron el premio Nobel por la paz Pérez Esquivel, la madre de plaza de mayo Nora Cortiñas y el referente del Centro de Ex Combatientes de La Plata Ernesto Alonso, al viajar a Malvinas por visibilizar y luchar por esta historia que forma parte de la identidad de los ex combatientes, torturados por sus superiores.
Además se repudio el intento del gobierno de mover este feriado 2 de abril para restarle y borrar la importancia que este mismo día implica no solo para los veteranos sino para todo el pueblo argentino y latinoamericano en su lucha contra los crímenes de las dictaduras y por la soberanía de América Latina, donde el imperio británico constantemente entrena tropas e instalo una base militar en las islas.
A continuación reproducimos el documento que leyeron los ex combatientes durante acto, en el que se evidencian con más detalles toda esta clase de denuncias:
2 de abril de 1982-2 de abril de 2017
A 35 años del conflicto del Atlántico Sur rendimos homenaje a los ex combatientes y a los caídos en la guerra de Malvinas. Por Memoria, Verdad, Justicia, Soberanía, estamos aquí presentes en esta plaza histórica conjugando lo que hace mucho tiempo venimos proponiendo, es resignificar definitivamente lo que representa el 2 de abril para los argentinos, lo que representa el 2 de abril para los ex soldados conscriptos que participaron en la guerra de 1982.
La causa Malvinas no les pertenecen a los que llevaron adelante la historia más negra que sufrió el pueblo argentino durante la dictadura cívico-militar-eclesiástica, donde practicaron el terrorismo de Estado, donde no defendieron los intereses del pueblo, llevando adelante un plan económico que desbasto el aparato productivo, persiguiendo a trabajadores, desapareciendo, torturando y apropiándose de todo lo que se podían apropiar hasta la vida. No lo hicieron en nuestro nombre, no lo hicieron en nombre del pueblo argentino lo hicieron porque siempre tuvieron la dependencia con el imperialismo y fueron funcionales a sus intereses.
Así como el 24 de marzo de 1976 dieron el golpe al pueblo, el 2 de abril de 1982 utilizaron el sentimiento inclaudicable de nuestro pueblo con la causa Malvinas. Malvinas esta en el ADN de nuestra identidad. Las fuerzas armadas de Videla y de Galtieri no estaban preparadas para la defensa de la soberanía nacional sino bajo la Doctrina de la Seguridad Nacional y es por ello que todo término como una aventura bélica, traicionando a nuestros soldados y al pueblo argentino.
Si hay algo que nos alejo de Malvinas fue la guerra que decidió la dictadura cívico-militar-eclesiástica que le permitió finalmente al imperio británico multiplicar en 23 veces los territorios ocupados y la militarización del Atlántico Sur con la instalación de la fortaleza de Monte Agradable que amenaza la paz de Argentina y la paz de la región.
Por eso afirmamos que a 41 años de la última dictadura cívico-militar y a 35 años de la guerra de Malvinas, en tiempos donde se quiere instalar nuevamente la teoría negacionista que la única guerra que hubo durante el periodo que va del ’76 al ’83 fue la guerra de Malvinas. Los ex soldados combatientes de Malvinas, culminado el hecho bélico, a pesar de la imposición de silencio impuesta con lo peor del aparato represivo denunciamos con nombre y apellido a quienes cometieron graves violaciones a los derechos humanos.
Los estaquiamientos, enterramientos, inmersión en agua helada, picanas con teléfonos de campaña, golpizas, simulacros de fusilamiento y otros tratos crueles inhumanos y degradantes fueron todos cometidos por cuadros de las fuerzas armadas, hechos que continúan impunes. Por eso hacemos responsables al Poder Judicial de la Nación por negarnos el acceso a la justicia y el derecho a la verdad.
Este año se cumplen diez años del inicio de la causa que investiga las violaciones de los derechos humanos con cientos de hechos denunciados y miles de documentos desclasificados de las fuerzas armadas que dan cuenta del verdadero accionar de los militares durante el conflicto y aún no hubo un solo llamado a declaración indagatoria. En Malvinas estuvo el aparato represivo. A Malvinas no fue el ejército de San Martín, sino el de Videla, Galtieri, Anaya y Lami Dozo.
Los mismos que secuestraron, torturaron y asesinaron: Astiz, el Tigre Acosta, Pacino, Menéndez, Losito, Buser. Apropiadores de bebes y pilotos de los vuelos de la muerte, todos verdugos de los soldados de Malvinas.
A pesar de estos antecedentes el gobierno de Cambiemos por decisión del Presidente Macri y el Ministro Rogelio Frigelio por medio del Decreto 148/2017 modifica la integración de la Comisión Nacional de Ex Combatientes, incorporando a la misma a los cuadros de las fuerzas armadas.
El gobierno militariza nuevamente al sector de los ex soldados conscriptos y obliga a convivir a víctimas con victimarios, quebrantando la integridad psico-física de quienes fuimos torturados, dejados, estaqueados por quienes hoy se abogan falsos títulos, dejando de lado todas las políticas reparatorias que significaron el avance de la búsqueda de la verdad.
Rechazamos este atropello y responsabilizamos al gobierno de Macri por las consecuencias que ello implica. 123 tumbas se encuentran sin identificar en el cementerio argentino de Darwin (Islas Malvinas). La impericia, la improvisación demostrada por las fuerzas armadas se transformaron en dolor y sufrimiento de las familias que quieren saber cuál fue el destino final de sus seres queridos.
Gracias a la lucha de nuestras organizaciones y de los familiares logramos que la justicia declare el derecho a la verdad, que le asisten a las familias, producto de ello, el Estado Nacional solicito en el año 2012 la intervención de la Cruz Roja Internacional, tareas que se comenzaran a mediados de este año con la misión humanitaria lograr la identificación.
La identidad es un derecho. Por la identificación de las 123 tumbas N/N en el cementerio Argentino de Darwin, debemos asumir la cuestión Malvinas desde la perspectiva de fortaleza de los derechos humanos.
La usurpación británica instalo una fortaleza militar que amenaza a la paz de nuestra región. Malvinas es un campo de entrenamiento militar de las fuerzas armadas de Gran Bretaña y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), caladero de la 4ta flota de Estados Unidos y la puerta de entrada para la explotación de los recursos naturales de nuestra plataforma continental y el sector antártico argentino.
Un derecho humano fundamental es el derecho de los pueblos ávidos en la paz. Argentina es un pueblo de paz. América Latina es una región de paz.
Mientras se aumentaba el presupuesto militar y el avance el Monte Agradable, ya realizaban ejercicios militares, se montaba un aparato de espionaje electrónico hacia la región y se lleva a cabo las visitas a las islas del ministro británico anunciando una inversión de 180 millones de dólares en tecnología militar, la canciller Malcorra hacia campaña para ocupar el primer puesto de las Naciones Unidas (ONU).
El gobierno de Cambiemos firmo un acuerdo con los británicos para mejorar el desarrollo económico de las islas Malvinas, para explotar bienes naturales, para que sea acción de la pesca ilegal y que se lleven el petróleo a cambio de nada.
Presidente Macri, los argentinos ya transitamos la experiencia de estas relaciones carnales. Hoy podemos afirmar que nos encontramos en plena implementación de un plan sistemático de entrega de la soberanía, un plan de transferencia de los recursos económicos a los sectores concentrados de la economía en detrimento de los trabajadores y los sectores más vulnerables.
Es por eso que hoy podemos decir que se trata del mismo plan de entrega de nuestra soberanía, aquel que comenzó en la dictadura cívico-militar.
¡¡¡Volveremos a Malvinas de la mano de América Latina!!!