Brasil: Lula llevará a tribunales anulación de decreto de impuestos sobre transacciones
El jefe de Estado apuesta por un ajuste fiscal en el país para que los más ricos paguen un poco y así no tener que recortar los fondos de Educación y Salud.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio da Silva, defendió recurrir a los tribunales contra la anulación por parte de la Cámara de Diputados del decreto que intencionaba un aumento de las tasas del Impuesto sobre las Transacciones Financieras (IOF).
“Si no recurro ante el Poder Judicial, si no acudo al Tribunal Supremo, ya no gobernaré el país. Ese es el problema. Cada uno tiene su propia rama. El Congreso legisla, y yo gobierno”, manifestó el mandatario.
Asimismo, el jefe de Estado, citado por la plataforma Agencia Brasil refirió que “no proponemos un aumento de impuestos, sino un ajuste fiscal en este país para que los más ricos paguen un poco y así no tener que recortar los fondos de Educación y Salud. Hubo presión de las casas de apuestas, de las fintechs, no sé si del sistema financiero. Lo cierto es que prevalecieron los intereses de unos pocos en la Cámara de Diputados y el Senado, lo cual me parece absurdo».
Después de una derrota por amplio margen en la votación de la Cámara de Diputados, el proyecto para implementar aranceles a empresarios y transacciones bancarias aparece en un cartel entre las manos de Lula durante la marcha de la independencia de Bahía.
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) July 2, 2025
El gobierno advierte… pic.twitter.com/Quv7IrMcoy
De acuerdo con Agencia Brasil, la derogación del decreto que incrementó el Impuesto a las Transacciones Financieras (IOF) provocó el tercer cambio en las tasas en poco más de un mes, mientras se restablecieron las tasas vigentes hasta el 22 de mayo, cuando el Ministerio de Hacienda anunció los cambios.
Para algunos medios locales, el mensaje llega en un momento de alta tensión entre el Gobierno federal y el Congreso Nacional, en donde para compensar la pérdida de ingresos fiscales, el Ejecutivo propone crear un nuevo impuesto a las grandes fortunas, que afectaría a quienes perciban más de 50.000 reales (9.200 dólares) al mes, con una alícuota mínima del 10 por ciento.
