Gonzalo Sánchez •  Cultura •  18/11/2017

Assassin’s Creed Origins, el mejor juego de la saga

Así de claro, las aventuras de Bayek, el último medjay, son las mejores que han visto toda la saga de Ubisoft.

Assassin’s Creed Origins, el mejor juego de la saga

*ATENCIÓN SPOILER ALERT*

¿No te has pasado la historia del juego? Ve a coger el mando y cuando termines, vuelve a leer este interesantísimo artículo.

Assassin’s Creed Origins, menudo juegazo ¿eh? Seguro que todos estamos de acuerdo con eso. Otra cosa es posicionarlo con el resto de juegos de la saga, muchos se llevarán las manos a la cabeza por el sacrilegio de decir que es mejor que el AC II. Guardad las hojas ocultas por ahora, dejad que os explique por qué. En mi opinión la saga Assassin’s Creed comenzó a bajar la calidad desde el AC III. Unas veces por tener una historia bastante mala por intentar llegar a todos los públicos y a quienes nunca hubieran jugado las historias de Altaïr y Ezio, el Black Flag por ejemplo. Eso sí, jugabilidad excelente. Otros por pasar directamente del presente y de los que vinieron antes, con el fruto del edén incluído.

Hay que reconocer que Assassin’s Creed Syndicate levantó bastante el vuelo. Volvió el credo, el fruto, los edificios tomados pasaban a nuestras manos y no a las de los enemigos… Sin embargo prescindió de la mejor idea del Unity, el cooperativo. Todo porque los ejecutivos de Ubisoft no quisieron dar más tiempo a los desarrolladores. Muchas entregas seguidas con diversos apartados mediocres y los bugs del Unity hicieron mella en el notable Syndicate. En el sentido de que no generó los beneficios deseados. Y por ahí ya no. Ubisoft vio en peligro su saga más rentable y, ahora sí, decidió darle un descanso y escuchar el feedback de los fans.

De manos de los mismos que hicieron el Black Flag bajo la dirección de Ashraf Ismail, han sabido darle a Origins lo que le faltó a Black Flag, una narrativa excelsa, llena de guiños a los primeros juegos de la saga (cuando Bayek se vuela el dedo anular con la hoja oculta, cuando deja caer la calavera de un buitre al suelo dejando el característico símbolo de los Asesinos, cuando habla con Aya sobre los fundamentos del credo…). Han creado un personaje principal carismático y unos secundarios a la altura. Vuelve el Fruto del Edén a primera línea y regresan las escenas del presente con personaje controlable y algún viejo conocido.

En cuanto a la jugabilidad, por fin los combates molan como debieran. Ya no estamos ante el aburrido sistema de ataque/contraataque con un solo botón. Y el componente rol le ha sentado de maravilla. Crafteo, caza, diferentes armas con diferentes movimientos y ataques especiales, un mapeado enorme y muy vivo, lleno de misiones secundarias, tumbas, y actividades muy disfrutables como el hipódromo y los combates de gladiadores. Todo ello manteniendo el sigilo intacto, tan difícil y satisfactorio como siempre, incluso un poco más. Por suerte Senu nos ayuda mucho y bien.

Los orígenes de la hermandad son sólidos. ¿Se mantendrán igual en las siguientes entregas? Dependerá si Ubisoft ha aprendido a no explotar demasiado sus sagas. Sus tres franquicias estrella (Assassin’s Creed, The Division y Watch Dogs) deberían tener un año para cada una. Este ha sido el año de Assassin’s, 2018 el de nuevo The Division y 2019 el del tercer Watch Dogs. La espera merece la pena a los jugadores porque obtendrán un mejor juego y a Ubisoft que conseguirá mayores beneficios.

Yo ya he acabado la historia del juego y ahora quiero limpiar el mapa y hacer las secundarias que me quedan antes de la llegada de las expansiones. Hacía tiempo que no disfrutaba tanto de un Assassin’s Creed.

Gonzalo Sánchez. Twitter: @ProtestFor36


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