El Partido Animalista reclama la mejora urgente del bienestar físico y emocional de los cuatro perros de la Guardia Civil de Bailén
La formación critica al PSOE y a Podemos por excluir a los perros de caza, pastores y de trabajo de la Ley de Protección Animal, dejando a miles de animales en desamparo.

Madrid, 25 de noviembre de 2025 – El Partido Animalista PACMA ha calificado este martes como «gravísima e intolerable» la situación de los cuatro perros policía de la Guardia Civil de Baeza (Jaén), que ha sido denunciada por los propios agentes debido a las deplorables condiciones en las que viven. Las imágenes difundidas muestran perreras minúsculas, sin bebederos adecuados, con humedad permanente, moho e incluso riesgo de derrumbe, además de animales con problemas de salud.
PACMA considera inadmisible que el propio cuerpo encargado de velar por el cumplimiento de la normativa de protección animal mantenga a sus perros en instalaciones que recuerdan a las perreras de cazadores; el mismo sector que el partido ha denunciado históricamente por ser uno de los más problemáticos en España.
Desde la formación política atribuyen el mantenimiento de esta situación a lo largo del tiempo como consecuencia de la decisión del PSOE y Podemos de excluir de la Ley de Protección Animal a los perros utilizados para fines profesionales, una decisión que refleja ahora sus consecuencias.
Exigencias inmediatas a la Guardia Civil
PACMA pide a la Guardia Civil la reforma urgente de las instalaciones de Bailén para garantizar el bienestar físico y emocional de los animales, así como la implantación de protocolos adecuados de enriquecimiento ambiental, atención veterinaria regular y ejercicio diario, supervisados por profesionales independientes. Asimismo, la formación animalista solicita una auditoría interna que permita asegurar que ningún otro cuartel del país mantenga a perros en condiciones semejantes.
Una propuesta alternativa: tecnología en lugar de perros policiales
Desde el Partido Animalista explican que España debe avanzar hacia la sustitución progresiva del uso de perros policía por medios tecnológicos avanzados, en constante desarrollo, como dispositivos de detección de sustancias, sensores químicos de alta precisión o escáneres portátiles que permiten garantizar la seguridad sin exponer a los animales a estrés, explotación o confinamiento.
