Aita Mari rescata a 56 personas en su última misión de 2025

Este viernes a las 08:44 en el Mediterráneo Central a 34 millas al suroeste de Lampedusa, el AITA MARI ha llevado a cabo un rescate de 56 personas; 33 adultos de los cuales 17 eran mujeres y 16 hombres, 7 bebes (cuatro menores de un año y un bebe de dos meses) y 16 menores de edad.

El bebe de dos meses a tenido que ser evacuada del Aita Mari junto a sus padres, debido a la desnutrición extrema y deshidratación extrema que padecía.

Según los primeros datos recogidos de las personas asistidas, los países de procedencia son de Guinea Conakri, Costa de Marfil, Burkina Faso, Gambia, Mali y Camerún.

Las personas rescatadas se encuentras a salvo y están recibiendo la asistencia humanitaria a bordo del Aita Mari.

Durante la madrugada del 9 de diciembre, desde Malta mandaron un mensaje SAR NAVTEX (Sistema de comunicación para urgencias en el mar) avisando de hombre al agua en zona SAR Malta.

A su vez y de la misma manera, desde Roma emitieron un mensaje SAR NAVTEX de un barco de pesca que zarpo desde Tunez con 50 personas migrantes en posición desconocida. El Aita Mari hizo acuso de recibo e informo de nuestra disposición para colaborar en las operaciones de búsqueda y salvamento.

Debido a los mensajes recibidos, queda claro que todavía hay riesgo de pérdidas de vidas en el mediterráneo central y refuerza aún más el trabajo que hacen los barcos de rescate tales como el Aita Mari.

Finalmente, las autoridades italianas nos han concedido el puerto de Brindisi para desembarcar a los supervivientes, a dos días del lugar de donde nos encontramos. Denunciamos la política de asignación de puertos lejos de la zona de rescate supone reducir los recursos de salvamento y los testigos de la violación de derechos humanos en esta zona del Mediterráneo.

Hace dos días conocimos la noticia de la detención del barco de rescate HUMANITY 1 por negarse a comunicar con las unidades navales libias, autodenominadas “guardacostas”. Por primera vez un barco de la Flota de la Justicia a si detenido por negarse a mantener comunicaciones con el centro de comunicación libio.

La Flota de la Justicia, a la que pertenece el Aita Mari, no reconoce a las unidades libias como legítimos actores de salvamento debido a su documentado historial de abusos contra los derechos humanos.