UGT rechaza las nuevas condiciones de acreditación en el Congreso por excluir a autónomos y pequeños medios

La Agrupación de Periodistas de UGT rechaza las nuevas condiciones de acreditación para los
periodistas en el Congreso por que excluye a los profesionales autónomos y a los pequeños medios.
La Agrupación de Periodistas de UGT ha expresado su rechazo frontal a las nuevas condiciones de acreditación para cubrir la actividad parlamentaria, al considerar que las medidas aprobadas por la presidenta de la Cámara, Francina Armengol, discriminan a profesionales independientes y proyectos informativos de pequeña escala, mientras no atajan el verdadero problema del intrusismo y la desinformación.
La Agrupación de Periodistas de UGT (AGP-UGT) ha mostrado su “profunda preocupación” ante la reciente reforma del Reglamento del Congreso de los Diputados sobre la acreditación de medios de comunicación. El sindicato sostiene que la nueva normativa, aprobada en julio y presentada en detalle la semana pasada, “supone un retroceso preocupante para nuestra profesión y amenaza gravemente la pluralidad informativa en el Parlamento”.
Uno de los aspectos más polémicos es el requisito de que los medios cuenten con al menos diez trabajadores en plantilla para poder acreditarse. Según la agrupación, esta condición “discrimina claramente a pequeños medios y proyectos autogestionados, impulsados por profesionales independientes con escasos recursos iniciales”.
UGT denunció que “los periodistas y fotoperiodistas autónomos van a ser penalizados en su trabajo: años de experiencia, rigor y dedicación quedan invisibilizados por una norma que prioriza únicamente el tamaño y la estructura de los medios”. A su juicio, la reforma “castiga a quienes apuestan por proyectos informativos independientes, mientras se deja impune a quienes manipulan o desinforman con el respaldo de medios consolidados”.
El sindicato también criticó la creación del Consejo Consultivo de Comunicación Parlamentaria, integrado por periodistas propuestos por la Asociación de Periodistas Parlamentarios, sin consulta previa a las organizaciones sindicales. “La reforma se ha hecho al margen de quienes representamos a los profesionales”, señalaron.
Aspectos positivos, pero insuficientes
La agrupación reconoció como medidas necesarias el respeto a los diputados, la prohibición de grabar sus dispositivos móviles y de invadir espacios reservados, pero consideró que estas disposiciones “no compensan la discriminación hacia medios pequeños ni el rechazo a la acreditación de quienes colaboran en equipos de comunicación de partidos o fundaciones políticas”.
Entre las restricciones más controvertidas destacan: la prohibición de acreditar a periodistas que trabajen en equipos de comunicación de partidos, las limitaciones para reporteros gráficos —que solo podrán grabar en zonas habilitadas y con autorización expresa—, y la exclusión de medios digitales de pequeña escala o departamentos de comunicación corporativos.
Críticas a PSOE, Sumar y PP
La AGP-UGT denunció además que el reglamento “refuerza prácticas populistas y sectarias”, criticando la complicidad de PSOE y Sumar, que lo aprobaron, y la “inhibición del PP, que respalda con su silencio la desinformación y las estrategias de manipulación mediática”.
Advertencia sobre arbitrariedad
El sindicato alertó de que el nuevo sistema de acreditaciones, gestionado por la Dirección de Comunicación del Congreso, “abrirá un proceso de revisión arbitrario, donde la interpretación de los criterios podría discriminar aún más a medios independientes”.
En su comunicado, la AGP-UGT concluyó que la reforma “constituye un ataque a la profesión y a la diversidad de medios en el Parlamento”, y llamó a los grupos políticos a abrir un diálogo con periodistas y sindicatos. “El Congreso debe ser un espacio abierto a todos los profesionales de la información que cumplan criterios de independencia y rigor, no un lugar donde se privilegien intereses políticos o económicos”, remarcaron.