Redacción •  Negocios y Ocio •  27/11/2023

Consejos para obtener la custodia compartida durante un proceso de divorcio

Los procesos de divorcio tienden a ser especialmente delicados, habiendo de hacer frente a una amplia variedad de cuestiones capaces de poner en jaque el bienestar tanto emocional como financiero. En este aspecto, la decisión sobre la custodia de los hijos es uno de los temas más conflictivos. A fin de cuentas, formar parte de la educación e infancia de los pequeños es algo esencial y resulta fundamental seguir los pasos adecuados para obtener las mejores condiciones para los progenitores y los niños. Con esto en mente, queremos plantear algunos consejos que te ayudarán a obtener la custodia compartida, evitando muchas de las batallas legales asociadas al final de un matrimonio.

Consejos para obtener la custodia compartida durante un proceso de divorcio

Qué es y cuáles son los requisitos de la custodia compartida

Antes de comentar cómo obtener la custodia compartida, es importante explicar en detalle en qué consiste. Se trata de uno de los puntos más delicados en cualquier proceso de divorcio y, como tal, se antoja imperativo evaluar cuáles son sus eslabones principales. Un tema regulado en la Ley 15/2005 de 8 de Julio del Código Civil que permite a los progenitores pactar los convenios sobre la guarda y custodia de los hijos.

El objetivo de esta categoría es que ambos cónyuges participen por igual en la crianza de los niños, dividiendo la guarda y custodia de manera igualitaria durante su infancia. Lo más habitual es que se haga por semanas, haciendo que los hijos vayan cada una o dos semanas a casa de cada uno de los progenitores. De este modo, ambas partes estarán implicadas por igual en el crecimiento de los más pequeños.

Pero, ¿qué elementos se tienen en cuenta en los tribunales a la hora de emitir este acuerdo? Valores como la relación de los progenitores con los niños, el cumplimiento del deber como padres, las relaciones personales de los progenitores con terceras personas o la ubicación de los domicilios son algunos de los puntos más relevantes. Diferentes cuestiones que han de encajar a la perfección con el bienestar de los menores, poniendo su cuidado emocional y físico por encima de cualquier otro aspecto.

La importancia de mantener una buena actitud durante el divorcio

Lo más habitual cuando se comienza la gestión de un divorcio es que ambos progenitores se quieran implicar en el cuidado de los niños. En este punto, el primer consejo práctico que se debe llevar a cabo es el de contratar un buen abogado de derecho de familia. No importa si la relación entre ambas partes es cordial: este profesional será el encargado de mediar en la pareja y de ejecutar el convenio regulador de manera ejemplar para determinar todas las cuestiones asociadas al final del matrimonio.

A su vez, es importante mantener una actitud positiva en todo momento. Es muy habitual que el final de un matrimonio tenga su origen en discusiones y rencores acumulados. No obstante, nada de esto lleva a buenos términos en la separación: todo lo contrario, dilata el proceso. Por consiguiente, es mucho más sano aceptar la situación y entender que no todas las parejas están destinadas al “juntos para siempre” sin tomárselo especialmente a lo personal.

Todo esto habilitará el desarrollo de un divorcio de mutuo acuerdo, el cual es mucho más rápido y económico. El entendimiento y la empatía son valores privilegiados en un divorcio, incentivando así el pacto de la custodia compartida. Sin embargo, en caso de que se llegue a los tribunales, es importante que tu abogado reúna todas las pruebas para asegurar que seas parte del crecimiento de los niños. ¡Elige un buen profesional y todo se desarrollará como esperas!

Modificación de medidas, qué hacer si las situaciones cambian

El Código Civil estipula que, en caso de que se produzcan ciertos cambios en la vida de los progenitores, se puede solicitar la modificación de las medidas acordadas en el divorcio. Por consiguiente, si no se te concedió la custodia compartida en el pasado, es posible iniciar este proceso de la mano de tu abogado de familia en aras de recuperar la implicación en el cuidado de los niños.

Así pues, aunque en el pasado no obtuvieras la custodia compartida, si algo cambia en tu vida, tu relación con los niños o en el marco legislativo, es posible plantear de nuevo el caso. Momento en el que te animamos a tomar todos los consejos previamente mencionados para, esta vez sí, alcanzar el éxito en la sentencia.