Carlos Armada •  Opinión •  12/03/2018

Dos caras de una moneda, (venganza y equidad)

¿Quien puede decir a los padres de Gabriel, de Diana Quer, o de tantos otros, que nuestra sociedad funciona, que la prevención y la educación de nuestro sistema es el adecuado, que no es necesaria la pena de muerte o la cadena perpetua?…nadie

Sin embargo el gobierno del PP, apoyado por Ciudadanos, intenta vilmente aprovechar el dolor de la sociedad utilizando el populismo para exigir el mantenimiento de la figura de la prisión permanente revisable, que en su momento fue impuesta por la mayoría absoluta de su partido, y utiliza de forma despreciable la coyuntura de la desgracia vivida por la ciudadanía para obtener beneficio político  

Las familias de las víctimas están en su derecho de hablar desde el dolor, de querer venganza, de clamar por una justicia punitiva más contundente… cualquier persona lo haría, cualquier afectado por un hecho de estas características querría incluso tomar la justicia por su mano, es lo humanamente normal, pero un gobierno democrático debe de velar por la justicia y la equidad de la sociedad que gobierna

El PP y el PSOE con este tipo de casos realizan un ejercicio de cinismo de lo más impresionante, ¿Que ocurre con la corrupcion de la Junta de Andalucía que por desviar (presumiblemente), dineros destinados a construir un canal rebajaron la calidad de los materiales hasta tal punto que produjo la muerte de una niña en Alora? 

Donde estaban esos partidos que se dicen demócratas cuando el sistema agrede a Susana Guerrero, violentada desde los 13 años, embarazada, madre de una hija que denuncia presuntas agresiones sexuales del mismo engendro que violó y embarazó a su madre….¿donde?…donde está ese cínico gobierno del PP que permite que un fiscal jefe como el de Talavera de la Reina siga ejerciendo 

El dolor de las familias, su ánimo de obtener el mayor castigo contra los psicópatas malnacidos que han cometido tal aberración contra sus seres queridos es natural e imposible de ser condenada, pero nosotros como sociedad no debemos caer en la tentación de atacar de forma populista e insensata a ningun sector social. ¿Contra que sector de la sociedad podríamos dirigir nuestra irá por lo ocurrido con el pequeño Gabriel?, ¿contra las mujeres?, ¿contra los/as caribeños/as?, ¿contra las nuevas parejas de los padres separados?, ¿contra los negros/as?

Sin duda volverá a aparecer una campaña populista en aras de profundizar nuestra vía punitiva, campaña normalmente dirigida desde sectores de ideologíadictatorial y fascista que piensan que recortando derechos y castigando más duro y más fuertese consiguen mejores resultados. No es cierto, un psicópata no se cura con castigo, y un ser que realiza un crimen de este tipo padece indudablemente una grave psicopatía.

Hay que tener en cuenta que  los psicópatas tienden a crear códigos propios de comportamiento, por lo cual sólo sienten culpa al infringir sus propios reglamentos y no los códigos sociales comunes, aunque estas personas sí tienen conocimiento de los usos sociales, por lo que su comportamiento es adaptativo y pasa inadvertido para la mayoría de las personas. Solo se les puede tratar una vez han sido descubiertos, y desgraciadamente la mayor parte de las veces tenemos constancia de ello tras horrendos crímenes como el de Gabriel

Y precisamente en este tipo de actos, en estos momentos es cuando se ven las dos caras de la moneda. No hay palabras para definir lo ocurrido a un niño de 8 años. ¿Qué ha pasado por la cabeza de la persona que le ha matado?. Produce escalofríos pensar en la impotencia del pequeño, su primera reacción de incredulidad, su miedo despues. Se encoge el estómago y se enfría el corazón ante un acto como este.

Sólo puedo pensar en el dolor de su madre, en las esperanzas  y sueños vividos por Gabriel en su corta vida, ilusiones truncadas por una mente enferma. Imaginarse al padre…la culpabilidad que ha de sentir es inimaginable…su pareja, la mujer que el escogió para compartir una parte de su vida, aquella que le ofrecía amor…por otro lado a las ansias de venganza que ofrece esta situación debemos enfrentar la otra cara de la moneda, la de una sociedad avanzada, culta, humana, la que cree en una reinserción que no existe, porque no existen planes de reinserción…no se puede tratar de igual forma a delincuentes con diferentes psicopatías, no existen centros especializados, y los centros penitenciarios no son una solución, no reinsertan a nadie.

Desde los partidos políticos ha de pensarse que es lo que queremos, que sociedad queremos construir, como podemos dar respuesta al mismo tiempo a unos padres hundidos en el dolor y a una sociedad avanzada y hacerlo desde la justicia y la equidad, la cadena perpetua no es la solución y menos la pena de muerte, pero que el asesino de tus seres queridos se pueda cruzar contigo en la calle en 15 años sin estar reinsertado y sabiendo que puede volver a cometer una vez más el mismo delito…. tampoco

* Carlos Armada, Perito Criminólogo y Criminalista.

 


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