Equipe Media •  Opinión •  20/03/2017

Las venturas y desventuras de un proceso sucio

En la ciudad de Salé (Rabat-Marruecos) se desarrolla un juicio a los presos saharauis del campamento de Gdeim Izik, las autoridades de ocupación marroquíes quieren hacer creer que dicho proceso es un juicio justo por la muerte de varios agentes marroquíes durante el desmantelamiento violento del campamento saharaui en las afueras de la ciudad del Aaiun ocupada (Sahara Occidental). Mientras los familiares de los acusados, la sociedad saharaui y gran parte de la comunidad internacional, señalan que el mismo no deja de ser un proceso político por el cual Marruecos quiere escarmentar a la sociedad saharaui y mostrar musculo y mano dura, revestido todo ello de un “fino paño de seda” de justicia.

Todo el mundo sabe que los héroes de Gdeim Izik, eran en su gran mayoría los representantes así confirmados de los 20.000 saharauis que estuvieron en dicho campamento, no lo eran por asignación propia, sino por designación en asamblea popular, ellos en nombre de los allí acampados estaban negociando con las autoridades de ocupación en la ciudad del Aaiun las exigencias y mejoras para la población saharaui; las autoridades marroquíes al verse sorprendidas por las lógicas y certeras reivindicaciones de los “harapientos acampados”, y al constatar que el asentamiento crecía día a día y ante el miedo al contagio a otros lugares, actuaron de la única forma que conocen y se les da bien, rodear el campamento con policías y fuerzas auxiliares junto a los militares y disolverlo a la fuerza.

Lo que ocurrió posteriormente es ya conocido, el éxodo a pie por el desierto en dirección a la ciudad del Aaiun ocupado (20 km de distancia) de mujeres ancianos y niños, mientras los hombres y jóvenes se resistían en el campamento e intentaban frenar a los militares y policías marroquíes con lo que tenían a mano, para darles tiempo a los que iban a pie y que pudieran alejarse de las fuerzas militares que les agredían, aguantaron lo que pudieron pero el despliegue policial y militar marroquí sobre el terreno era imposible de detener, camiones llenos de agentes y militares marroquíes salieron de la ciudad de Smara ocupada la tarde antes del desalojo para ayudar a reprimir a los allí acampados, helicópteros, fuerzas antidisturbios armados de equipamiento represivo, camiones con cañones de agua, camiones y vehículos 4×4, furgonetas antimotines, equipos de sonido para desmoralizar con su estruendo, fuerzas militares y policiales traídos de todos los rincones de Marruecos y el Sahara ocupado, y ¿alguien cree que los mismos fueron con flores en la mano?; si lo creen así lo tienen fácil, busquen imágenes y verán a los policías con cascos, escudos porras y escopetas en mano. ¿A lo mejor las flores las dejaron en los vehículos?

Hoy por hoy (marzo del 2017) en la hermosa ciudad de Salé (Rabat, Marruecos) antiguo refugio de piratas berberiscos, se libra una lucha más soterrada por parte de las autoridades marroquíes, ya que su intención es, como mencionamos desde Equipe Media, el distorsionar el proceso para revestirlo de justicia y en esa labor, cuan piratas del siglo XXI se valen de todas sus artimañas y les aseguramos a los lectores que de eso saben mucho.

Hemos sido testigos de movilizaciones de menores para insultar a los saharauis que se desplazaron en apoyo de los héroes enjuiciados, movilizaron desempleados de la zona, incluso el gremio de los taxistas, todos con el fin de acallar a los presentes, han entorpecido el acceso a la sala donde se celebra el juicio a familiares de los acusados, mientras se facilitaba el mismo a marroquíes que nada tenían que hacer allí, cortaron la comunicación en los alrededores del tribunal con inhibidores de señal para complicar la información y retardarla, facilitaron equipos de sonido de gran potencia, para que los marroquíes afines pudieran increpar insultar y acallar a los saharauis, y lo gracioso de todo es que les facilitaban la electricidad desde la misma sede judicial, movilizaron a su ejército de navegantes en la red (Facebook, Twitter y otras redes) para inundarla y tratar de silenciar al pueblo saharaui, facilitaron el acceso a sus simpatizantes extranjeros Pseudos “especialistas y observadores” así como algún letrado, que eso sí, no pierden la ocasión de sugerir la marroquinidad del Sahara en cuanto tienen ocasión de ver un micrófono cerca.

Y eso no es todo, ya que decidieron desplazar a lo más “selecto” de los “notables” saharauis y otros “iluminados” desde el Aaiun ocupado, alojándolos en hoteles y desplazándolos a la sede del tribunal, con la intención de mostrar como esos saharauis (vendidos al mejor postor) rechazan a los condenados en un intento de mostrar una unidad completa de la “sociedad marroquí” en contra de los acusados, pero amigos lectores de Equipe Media, si creían que la imaginación de los servicios secretos marroquíes se acababa aquí, nosotros mismos nos vimos sorprendidos por la imaginación de dicho servicio secreto, y de no ser por la seriedad de lo que sucede, hasta resultaría cómico, ya que emplearon y utilizaron a inmigrantes africanos en su afán de sumar grupos en su cruzada contra los héroes de Gdeim Izik y los que les apoyan.

¿Eres africano?, ¿no has podido legalizar tu situación en Marruecos?, no te preocupes tenemos la solución, demuéstranos el amor que sientes por Marruecos y su Rey, y nosotros te ayudaremos a conseguir papeles, ¿y eso como lo hago?, tranquilo acude a las inmediaciones del tribunal de Salé (Rabat, Marruecos) y únete a los allí presentes levanta fotos del Rey y grita ¡Viva el Rey! , ¡Viva Marruecos!, ¡Fuera a los saharauis!, y tranquilo que luego tendrás tu recompensa. El próximo día 20 cuando se reanude el proceso los ataques continuaran, lo dicho PIRATAS DEL SIGLO XXI.


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